La asociación aelēc asegura, en un comunicado urgente que difundió ayer a última hora de la tarde, que "tenemos evidencias de que las centrales de generación de los socios de aelēc [aparte de distribuidoras de electricidad, las compañías susodichas también tienen centrales de generación] han cumplido con los requerimientos regulatorios en materia de control de tensión, como los contempla REE en el proceso de cálculo de restricciones técnicas, llegando incluso a operar por encima de las obligaciones regulatorias para contribuir a la estabilidad del sistema eléctrico”. Es decir, que los generadores no solo cumplieron con los protocolos correspondientes sino que, además, según aelēc, lo hicieron incluso por encima de las "obligaciones regulatorias". El comunicado aparece apenas unas horas después de que la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, anunciara, ayer, la publicación del "informe del Comité de análisis de las circunstancias que concurrieron en la crisis de electricidad del 28 de abril".
Aagesen compareció poco después de mediodía en el Consejo de Ministros, donde sintetizó el informe susodicho. La ministra señaló la falta de capacidades de control de tensión como causa del apagón, pero (y aparte de mencionar a Red Eléctrica) hizo especial hincapié también en las compañías eléctricas: faltaba en sistema capacidad para controlar la tensión, "bien porque no estaban programadas [esas capacidades] con suficiencia [Red Eléctrica, que es el operador del sistema eléctrico nacional, es responsable de esa programación], bien porque las que estaban programadas [la ministra señala aquí a las compañías eléctricas] no proporcionaban adecuadamente lo que decía la norma... O una combinación de ambas, pero lo que sí podemos afirmar hoy es que había parque de generación disponible suficiente para responder" (responder a las oscilaciones de la tensión que condujeron al apagón).
En este último extremo coincide aelēc, que señala en el comunicado que difundió ayer a última hora de la tarde, que "el 28 de abril, Red Eléctrica de España disponía de recursos suficientes para garantizar el control de tensión, incluidas centrales síncronas que, no obstante, decidió no despachar. Optó por gestionar la tensión con una capacidad síncrona limitada y un reparto geográfico desequilibrado, lo que dejó al sistema en una situación de vulnerabilidad".
La asociación de empresas de energía eléctrica concluye su escueto comunicado destacando que quedan por esclarecer "algunas cuestiones que a nuestro juicio tienen relevancia para el correcto análisis de los hechos: la operación de la interconexión con Francia, la distribución geográfica de la generación síncrona o los criterios aplicados por Red Eléctrica para el despacho de los ciclos combinados".
Con respecto a la información contenida en el informe del apagón, la ministra Aagesen señaló ayer que, de entre la información recibida por los expertos del comité, "hemos identificado también datos contradictorios. Hemos identificado datos incompletos y también nos hemos encontrado con información que finalmente no ha llegado".
El informe, que fue finalmente publicado anoche por el Miniterio, oculta la identidad de las instalaciones y las empresas propietarias de las instalaciones implicadas en el apagón. "Figuran los datos que nos permite compartir la ley, y los que los operadores también nos han permitido exponer tras las solicitudes formuladas", dijo ayer la ministra, que habló de "información anonimizada".
Los datos que podrían servir para identificar las empresas y personas jurídicas implicadas en lo sucedido "aparecen omitidos -dijo- en aras de proteger los derechos y las garantías de todos, y conforme al principio de la confidencialidad, y en la mayor parte de las ocasiones a petición expresa de los actores".
Así, lo que el Ministerio ha publicado no es el informe, sino la Versión no confidencial del informe del comité para el análisis de las circunstancias que concurrieron en la crisis de electricidad del 28 de abril de 2025 (que esa es su larga denominación), versión que aparece cuajada de párrafos tachados que impiden identificar los actores principales del apagón.
Endesa tiene más de 300.000 kilómetros de redes eléctricas; Iberdrola, 265.000 kilómetros de líneas eléctricas; y EDP, más de 50.000. La cuarta gran distribuidora de entre las que operan en el país, Naturgy, no forma parte de aelēc (tiene más de 100.000 kilómetros de líneas).
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