El proyecto tiene como conceptos básicos la seguridad, la confiabilidad, la calidad y la eficiencia en los equipos fotovoltaicos, y busca que su desarrollo principalmente en Bolivia y Argentina.
Según el director ejecutivo de Energetica, Miguel Fernández, la idea principal es “en el marco de la universalización ampliar la cobertura eléctrica, desplazando combustibles tradicionales (pilas, velas, GLP, diesel, biomasa), para lo cual son los Sistemas Fotovoltaicos Domésticos o Solar Home System de 3ª generación (SHS-3g), empezando por los pico PV, una herramienta indispensable”
Fernández asegura que en Bolivia sigue funcionando el modelo de la primera generación en electrificación fotovoltaica el Solar Home System de 50 Watts pico (SHS 50 Wp). “En esa época –dice- estos equipos eran el resultado de la adaptación de tecnología de 12 VDC del automóvil (baterías, reguladores electromecánicos, reles, etc.) y de productos como la iluminación fluorescente en 220 V para los cuales se fabricaban balastos electrónicos que permitía que funcionen con 12 VDC”.
“Una segunda generación –continúa-, se forjó entre los años 90 y 2000, donde se introdujeron varias mejoras sustanciales. Las lámparas fluorescentes fueron reemplazadas por lámparas CFL de alta eficiencia diseñadas para 12 VDC, con lo que la potencia instalada por lámpara bajo de 20 W a 7 y 11 W, se incorporó la electrónica de estado sólido en los reguladores electrónicos, fusibles electrónicos, adaptadores de voltaje regulable para bajar de 12V hasta 3V y así energizar radios a pilas, añadiéndose además baterías diseñadas específicamente para sistemas solares”.
Respecto a los sistemas de tercera generación, el director ejecutivo de Energetica explica que “innovaciones tecnológicas importantes han sido incorporadas, como ser el uso de LED para iluminación que reduce las potencias de las lámparas a 3 W, acumuladores recargables y baterías de litio y, finalmente la microelectrónica incorporada”.
Así, la conclusión es una tecnología menos costosa y por lo tanto más accesible; físicamente más reducida y liviana, fácil de transportar y con esquemas de conexión “plug and play” que minimiza la presencia de técnicos especializados y simplifican la instalación.
El proyecto tiene por objeto evaluar estos equipos y sus características tecnológicas en función de su aplicabilidad, Sin embargo al ser una tecnología relativamente nueva, los sistemas fotovoltaicos de tercera generación en América Latina no cuentan con protocolos de testeo y estándares que permitan comparar su eficiencia con el sin número de ofertas en el mercado.
La siguiente fase comprende la instalación y medición de casi mil unidades de estos equipos en Bolivia y Argentina, con el objeto de hacer un testeo intensivo en campo y laboratorio. En esta última tarea participan el Centro de Energías Renovables de la Universidad Nacional de Ingeniería (CER-UNI), de Perú; el Instituto de Energía Solar de la Universidad Politécnica de Madrid (IES-UPM), de España; el Instituto nacional de Tecnología Industrial (INTI), de Argentina; y, de Bolivia, el Instituto Boliviano de Normalización y Calidad, y el Instituto Boliviano de Metrologia (IBMETRO).
Más información:
www.energetica.org.bo