El Cpvrs es un sistema completamente integrado con una apertura solar de 7,2 metros cuadrados y una potencia total de 2,16 kWp. Está diseñado para ser instalado en plantas de ensamblaje descentralizadas para, a continuación ser transportado a su lugar de destino como una sola unidad, lista para ser usada. De esta forma se optimiza la logística y se minimizan los costes de instalación y de puesta en marcha.
Esta tecnología ha sido íntegramente desarrollada en España, y Valldoreix Greenpower dispone de cuatro patentes propias que la protegen a nivel internacional. Entre sus características principales destacan el sistema de ensamblaje patentado, los paneles receptores que usan un sistema laminado de interconexión que la empresa denomina Cpvlis, o el hecho de que los seguidores se montan en campo mediante hinca-postes, un proceso muy económico en grandes instalaciones debido al uso de equipos automatizados. En todo caso, también se puede instalar de forma sencilla en la parte superior de tejados planos.
El sistema de seguimiento solar híbrido está basado en un sensor de posición solar patentado (Misps). Con motores paso a paso y un sistema de gestión avanzada con encoder de retroalimentación. Lo que permite un seguimiento continuo ultra-suave, con reducción de vibraciones y amplio rango dinámico. El sistema Cpvrs está disponible tanto en configuraciones de baja tensión como de alta tensión.
Socios locales
Valldoreix Greenpower está buscando socios locales que cierren definitivamente el círculo de su idea de negocio. “La clave del sistema es la posibilidad de optimizar la logística y facilitar las tareas de montaje, lo cual es viable gracias a sus exclusivas patentes tecnológicas (Cpvrs, Misps, Cpvlis, Icpvs) y al diseño de un innovador proceso de producción”.
La empresa explica las tres fases de este proceso: Valldoreix Greenpower envía los componentes del sistema a plantas de ensamblaje localizadas en el mercado de destino; en la planta de ensamblaje tiene lugar el montaje y las pruebas de funcionamiento de los sistemas Cpvrs; y por último, el producto se transporta a los campos solares como una sola unidad y a punto para ser usado.
La meta de Valldoreix Greenpower es aplicar este modelo de negocio en todos aquellos países con una climatología óptima para un sistema de concentración. “Para ello, necesita de un socio en cada país que ayude en el proceso de producción. Los socios y propietarios de las plantas de ensamblaje serán los encargados del proceso de montaje, transporte e instalación, además de su comercialización”.
Según la empresa, “convertirse en un socio local es muy sencillo”. No se necesitan grandes infraestructuras ni tampoco experiencia en la producción de sistemas fotovoltaicos. Lo que esperan de él es que comercialice el producto en su país, que ensamble los sistemas Cpvrs en sus instalaciones y que los instale en su lugar de destino.
La empresa catalana se encuentra en plena operación de captación de socios locales en todos aquellos países que poseen un nivel de radiación solar directa suficiente para hacer el producto atractivo. A su vez, Valldoreix Greenpower está inmersa en un proceso de ampliación de capital para poder desarrollar plenamente su ambicioso proyecto.
“Estamos muy orgullosos de nuestro sistema Cpvrs, que permite que los sistemas de concentración dejen de ser un producto de nicho y pasen a competir con los sistemas fotovoltaicos tradicionales” afirma Ricard Pardell, gerente de Valldoreix Greenpower. Pardell tiene experiencia en el sector de la concentración fotovoltaica ya que antes trabajó en la también empresa española Sol3g, que en 2006 realizó su primera instalación piloto.
“Somos una empresa en pleno crecimiento con grandes proyectos a la vista; nuestro departamento de I+D sigue investigando y desarrollando nuevos productos que mejoren el aprovechamiento de la energía solar”.
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