El sector eï¿½lico reclama estabilidad regulatoria para seguir siendo un referente mundial

Estabilidad regulatoria, consenso social y político, desarrollo de las redes de transporte, I+D, competitividad, mercado único europeo. Todo ha pasado por las mesas de la Convención Eólica que ha reunido hoy en Madrid a muchos protagonistas de un sector que mira el futuro con indudable optimismo. Lo que no quiere decir que el fututo esté libre de obstáculos.

El presidente de la AEE, José Donoso, ha puesto en evidencia “la creciente internacionalización de la empresa española, no sólo en lo relativo a promotores o a fabricantes de aerogeneradores, sino también en suministradores de servicios o de componentes”. Bastaba, ha dicho, darse una vuelta por la feria Windpower 2008 celebrada la pasada semana en Houston (Estados Unidos) para darse cuenta. Para Donoso “la palabra clave que lo explica todo es consenso. Consenso social y político que ha convertido a España en el caso de éxito paradigmático de un desarrollo acertado de la energía eólica”.

El director general del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), Enrique Jiménez Larrea, ha señalado los tres pilares básicos en los que se asienta el futuro del sector: la directiva europea y su objetivo del 20% de renovables para 2020, la ley de Energías Renovables en España, que afianzará un marco estable y el nuevo Plan de Energías Renovables (PER) 2011–2020. “Las tres cosas deberían dar seguridad y estabilidad para que los escenarios de prospectiva energética sean realmente la senda por donde marchemos”.

Luis Atienza, presidente de Red Eléctrica de España (REE), piensa que “al final de esta década estaremos cerca de un 30% de electricidad de origen renovable”. Y cree que “la independencia de REE ha sido clave en la penetración de las renovables en la red. Qué más quisieran los biocarburantes que sus sistemas de distribución fueran independientes como el caso de la electricidad”.

Atienza ha hecho un comentario considerado clave por muchos asistentes. Refiriéndose al cambio cultural que se ha dado en el seno del operador del sistema eléctrico, ha señalado que “cuando yo llegué a REE me decían que superar los 9.000 MW eólicos era suicida. Y hemos conseguido avanzar siendo proactivos. Ahora tenemos 15.000 MW instalados, con puntas de producción de 11.000 MW, y podemos seguir creciendo para cumplir los objetivos del PER.

Para lograrlo, Luis Atienza ha apuntado varios retos: “seguir desarrollando la red para hacerla más robusta y flexible, aumentar las interconexiones, instalar más centrales de bombeo y otros sistemas de almacenamiento de electricidad, trabajar más la gestión de la demanda y lograr una mayor flexibilidad del sistema gasista que, hoy por hoy, es el que hace de colchón de la variabilidad de la producción eólica”.

Más información:
www.aeeolica.es

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