Los campamentos de refugiados saharauis en Argelia llevan 30 años resistiendo en el desierto. Para ello han creado una red de huertos en pleno desierto del Sahara que son esenciales para garantizar su alimentación. El problema es que los grandes huertos se riegan hoy por hoy con bombas de gasoil de difícil mantenimiento, emisoras de CO2 y poco apropiadas a las condiciones de temperatura y salinidad de la zona. De hecho sus frecuentes averías comprometen la producción de los huertos.
El proyecto Sustenta busca proporcionarles un método de bombeo más eficaz y sostenible, y para ello ha recurrido a la eólica como fuente de energía. La iniciativa consiste en el diseño de un molino eólico simplificado y especialmente adaptado a las características de la zona, que permitirá regar las 8 hectáreas del Huerto Extremadura, en el campo de refugiados de Dajla..
Este proyecto tiene, además, una importante novedad: Sustenta enviará a Dajla a varios miembros de la organización, encabezados por un ingeniero, quienes instruirán a jóvenes saharauis en la construcción de estos molinos con los materiales disponibles en la zona, firmando un acuerdo de colaboración con el centro de Formación Profesional de Gazuani. Además, montarán una línea de producción de molinos en sus talleres. "El objetivo no es enseñarles a pescar, sino enseñarles a construirse la caña", dicen los promotores de la iniciativa.
La ultima fase de Sustenta, que será presentado mañana día 16 en n el Casal del Poblenou (Barcelona) por Miguel Gilaranz, escritor y vicepresidente de la asociación, consiste en documentar paso a paso, mediante fotos y vídeo, todo el proceso de construcción y posteriormente elaborar un material docente traducido a varios idiomas, que pueda ser utilizado en cualquier punto del planeta.