El autoconsumo solar ha multiplicado por 65 el número de instalaciones en Andalucía desde 2019 (tras la derogación del impuesto al Sol) y superaba a finales del año pasado las 171.000 instalaciones FV, con una potencia instalada de más de 1.560 megavatios (según el Informe Anual del Autoconsumo de la Asociación de Empresas de Energías Renovables, APPA, a finales de 2024 en España había 559.532, por valor de 8.585 megavatios, MW). La potencia andaluza acumulada en autoconsumos supone a día de hoy, según datos de la Junta, casi el 11% del total de potencia renovable instalada en la región, donde el sector ha ejecutado este año pasado 58.000 nuevas instalaciones, dato que supondría un elevadísimo porcentaje sobre el total de instalaciones de autoconsumo puestas en marcha en 2024 en todo el país (79.400, según el Informe Anual de APPA).
Los datos que la Junta aporta en su Hoja de Ruta sobre el autoconsumo colectivo también son llamativos. En Andalucía -concreta la Hoja- existen ya "más de 1.000 instalaciones de autoconsumo colectivo, en su mayor parte comunidades de vecinos, que suman casi 34 MW de potencia instalada", y cuyo desarrollo se ha producido "fundamentalmente" en los últimos 4 años, "en los que se ha multiplicado por 25 su número y movilizado inversiones por valor de más de 40 millones de euros". La Junta considera el autoconsumo colectivo "un paso intermedio en la dinamización de las comunidades solares y energéticas". Además -adelanta la Hoja-, la región cuenta a día de hoy "con un número incipiente de proyectos de comunidades solares y energéticas por todo el territorio de Andalucía (...) que agrupan a un número importante de empresas, ciudadanos y administraciones locales".
Habida cuenta de todo ello, la Junta de Andalucía ha considerado necesario el "diseño y ejecución de una hoja de ruta" que permita la instalación de, "al menos, 1.000 nuevas instalaciones con una potencia de 68 MW". Y de ahí, la Hoja de Ruta del Autoconsumo Colectivo y las Comunidades Energéticas que acaba de presentar, un documento que quiere constituirse en "instrumento vertebrador" para el despliegue del autoconsumo colectivo y las comunidades solares y energéticas y la consecución de "un modelo energético más descentralizado, distribuido, descarbonizado y participativo". La Junta aprovecha su Hoja para darle un tirón de orejas al Gobierno central, del que dice está dando un impulso "insuficiente" al autoconsumo colectivo y las comunidades energéticas.
Hoja de Ruta del Autoconsumo Colectivo y las Comunidades Energéticas (páginas 4 y 5)
«En abril de 2023, el Ministerio para la Transición Energética y el Reto Demográfico publicó el proyecto de Real Decreto por el que se desarrollan las figuras de las comunidades de energías renovables y las comunidades ciudadanas de energía. En el texto de este borrador se afirmaba que el "interés y desarrollo de nuevos modelos, en general en el marco de la participación ciudadana y, en particular, con relación a las comunidades de energías renovables y comunidades ciudadanas de energía, necesitará, para su consolidación y desarrollo sostenido a medio plazo, de un marco jurídico adecuado que proporcione seguridad jurídica, prevea la identificación y eliminación de barreras y contemple las medidas necesarias para su evolución".
Habiendo pasado más de dos años de la información pública de este borrador, aun se carece de ese marco jurídico, habiéndose superado ampliamente los plazos de transposición de ambas directivas que concluyeron el 30 de junio de 2021 en el caso de las Comunidades de Energías Renovables y 31 de diciembre de 2020 en el caso de las Comunidades Ciudadanas de Energía».
Lo que sí ha hecho el Gobierno central -reconoce la Junta en su Hoja- es apoyar a diferentes entidades andaluzas impulsoras de comunidades energéticas, entidades que han presentado sus proyectos a las convocatorias de ayudas estatales (financiadas con fondos comunitarios) y que han resultado beneficiarias de esas ayudas. "En concreto -especifica la Hoja-, en el marco de estas ayudas estatales se han aprobado 15 iniciativas andaluzas de proyectos singulares de comunidades de energía, con un presupuesto de casi 15,8 millones de euros; así como de siete Oficinas para la Transformación Comunitaria (OTC), con una ayuda de 1,9 millones de euros que actualmente prestan sus servicios por todo el territorio de Andalucía".
Hasta aquí la fotografía -en lo que se refiere autoconsumo colectivo y comunidades energéticas en Andalucía- a día de hoy. El objetivo ahora es -según la Hoja de Ruta- impulsar la creación de 1.000 nuevas instalaciones con una potencia de 68 MW.
La Hoja de Ruta andaluza concreta en 7 las medidas clave a implementar, 7 medidas que están focalizadas -explican desde la Agencia Andaluza de la Energía- en:
• Actuar desde el lado de la demanda para la creación de un mercado de servicios en torno al autoconsumo colectivo y las comunidades solares y energéticas, estimulando su implantación mediante actuaciones de divulgación, promoción, fomento y formación específicas que permitan mejorar entre la ciudadanía, empresas y administraciones locales el conocimiento de sus beneficios en términos energéticos, medioambientales, económicos y sociales.
• Contribuir al desarrollo de un tejido empresarial especializado en servicios, tanto técnicos como financieros, para la puesta en marcha de estas instalaciones y comunidades, a fin de impulsar desde el lado de la oferta la creación de ese mercado y su cadena de valor, dinamizando su despliegue en el territorio y potenciando su huella industrial en Andalucía.
• Apoyar el desarrollo de proyectos de autoconsumo colectivo y de mejora energética impulsados por comunidades energéticas, facilitando el acceso a las líneas de financiación autonómicas en materia energética y estableciendo mecanismos específicos para la intensificación de las ayudas a estos proyectos.
• Establecer un marco de alianzas basado en la colaboración público - privada y con las entidades locales para coordinar e impulsar el desarrollo del autoconsumo colectivo y las comunidades energéticas, así como para la creación de sinergias, tanto a nivel andaluz como europeo.
• Facilitar el acceso a las empresas e industrias que conforman la cadena de valor asociada al autoconsumo colectivo y a las comunidades energéticas, dando visibilidad a los recursos disponibles en el territorio andaluz.
• Fomentar el autoconsumo industrial, a través de instalaciones de uso colectivo, como elemento para reforzar la competitividad de las empresas y mejorar el desempeño ambiental en los espacios productivos de Andalucía.
• Realizar un seguimiento continuo de la evolución de este nuevo modelo energético participativo basado en una gestión descentralizada de la demanda de energía, dando a conocer las entidades que se están sumando a este mercado en el territorio andaluz.
La Hoja, tras definir esos "focos" de interés, incluye un decálogo de "acciones previstas" para el impulso del autoconsumo colectivo y las comunidades energéticas. Son estas
1 • Articulación de mecanismos efectivos de colaboración entre los actores claves del autoconsumo colectivo y comunidades solares y energéticas en Andalucía, mecanismos que deben ser orientados a fortalecer las cadenas de valor mediante su integración en redes colaborativas, compartiendo información útil en su respectivo ámbito de conocimiento para todos los intervinientes: Manifestación de Interés y Protocolo de Colaboración.
Para el desarrollo de esta medida se prevé lanzar una manifestación de interés dirigida a las entidades interesadas en impulsar el autoconsumo colectivo y las comunidades solares y energéticas en Andalucía, ya sean públicas o privadas.
Entre los actores firmantes de la manifestación de interés se incluirán (1) empresas que ofrecen servicios y/o herramientas digitales dentro de las cadenas de valor asociadas al autoconsumo colectivo y las comunidades solares y energéticas en Andalucía, ya sean asesores, promotores, gestores o financiadores; (2) asociaciones empresariales y clústeres; (3) grupos de investigación que desarrollen soluciones en estos ámbitos; (4) entidades financiadoras; (5) administraciones locales y sus agrupaciones; (6) comunidades energéticas existentes en Andalucía; y (7) centros formativos públicos o privados.
2 • Visibilización de las cadenas de valor asociadas al autoconsumo colectivo y las comunidades solares y energéticas, mediante la identificación y caracterización de sus capacidades, experiencia y proyección: Catálogo de Actores de la Cadena de Valor.
El catálogo, que será público, contendrá una ficha para cada entidad con una descripción de su actividad y de los servicios o productos más representativos que ofrecen, así como las iniciativas de innovación y los principales proyectos desarrollados en los últimos años, en el caso de ser entidades firmantes del convenio de colaboración.
3 • Difusión de las iniciativas actuales de comunidades energéticas que faciliten el conocimiento de las mismas y sirvan de referencia para nuevas actuaciones: Catálogo de Comunidades Energéticas en Andalucía. El catálogo será público y accesible a través de la web de la Agencia Andaluza de la Energía, que se encargará de su actualización periódica.
4 • Divulgación y gestión del conocimiento para mejorar entre la ciudadanía, empresas y administraciones locales el conocimiento sobre los potenciales beneficios en términos energéticos, medioambientales y sociales que tienen el autoconsumo colectivo y las comunidades solares y energéticas: jornadas de difusión, talleres y cursos.
En la difusión de las jornadas también se contará con el apoyo de otros actores relevantes en el proceso de puesta en marcha de instalaciones de autoconsumo colectivo y comunidades solares y energéticas. Entre estos actores se encuentran las oficinas de transformación comunitarias (OTCs) que operan en la región. Hasta la fecha funcionan en Andalucía ocho OTCs.
5 • Financiación para promover el autoconsumo colectivo, comunidades solares y energéticas, con especial atención a aquellos colectivos más vulnerables: ayudas para la puesta en marcha de instalaciones para compartir energía.
Esta medida se concretará -explica la Hoja de Ruta- mediante la inclusión de líneas específicas de ayuda en el marco de la nueva financiación Feder 21-27 a proyectos de inversión que puedan cubrir distintos tipos de instalaciones de autoconsumo colectivo y comunidades solares y energéticas, así como sus diferentes etapas, con independencia de su grado de madurez, y, en particular, para el desarrollo de este tipo de iniciativas en zonas vulnerables
6 • Asesoramiento especializado para el acceso a ayudas para instalaciones de autoconsumo colectivo y comunidades solares y de energía: mapas de actuaciones incentivables y asesoramiento a través de las Oficinas Locales de Transición Energética de Andalucía (Oltean). La Agencia Andaluza de la Energía quiere que los mapas sirvan como "instrumento de apoyo en la toma de decisiones por parte de los principales actores que intervienen en la puesta en marcha de instalaciones de autoconsumo colectivo y comunidades solares y energéticas". Se incluirá en estos mapas información sobre qué tipo de actuaciones se incentivan en función de la tipología de proyecto.
7 • Despliegue de iniciativas replicables para profundizar en el conocimiento de las necesidades y barreras que presentan actualmente las comunidades solares y energéticas, desarrollando toda una batería de herramientas y soluciones que faciliten su extensión en el territorio, así como la puesta en marcha de nuevas propuestas donde puedan testearse estas soluciones: proyectos piloto.
Particularmente en el ámbito de esta medida, se analizarán las posibilidades que tiene la Administración de la Junta de Andalucía para utilizar el patrimonio de su titularidad para promover instalaciones de autoconsumo colectivo y comunidades solares y energéticas.
8 • Mejora de las capacidades de los actores locales para promover y poner en marcha instalaciones de autoconsumo colectivo y comunidades solares y de energía: formación especializada para las entidades locales.
La Agencia Andaluza de la Energía pondrá en marcha una segunda edición del curso de comunidades energéticas dirigido a responsables municipales en colaboración con GreenCities, EnerAgen y Ecodes. Adicionalmente, y en el marco de la Mesa de Autoconsumo en la que participa la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, se programarán talleres más especializados dirigidos a los responsables municipales. Toda la información sobre las actividades formativas dirigidas a los responsables municipales será accesible a través de la web de la Agencia Andaluza de la Energía.
9 • Posicionamiento a nivel europeo del modelo andaluz, enfocado a mejorar la gobernanza a nivel regional para la creación y el desarrollo de instalaciones de autoconsumo
colectivo, comunidades solares y de energía renovable: grupos de trabajo interregionales.
La Junta incluye en esta medida las actividades de internacionalización que desarrollará la Agencia Andaluza de la Energía en relación con las instalaciones de autoconsumo colectivo, comunidades solares y energéticas, para mejorar el posicionamiento del modelo andaluz en esta materia a nivel europeo. "Por un lado -explica la Hoja de Ruta-, se trata de poner en valor los casos de éxito regionales mediante su difusión a través de las redes nacionales y europeas en las que participa la entidad. De la misma forma -añaden los autores del documento-, se trata de aprender de las mejores prácticas desarrolladas en otras regiones nacionales y europeas en materia de autoconsumo colectivo y comunidades solares y energéticas, para su replicación y adaptación, cuando sea posible, en Andalucía".
10 • Apoyo a nuevas soluciones en los ámbitos tecnológicos y sociales asociados a las cadenas de valor relacionadas con todas las actividades que pueden desarrollar en torno a las comunidades solares y energéticas (generación, almacenamiento, agregación, CAES, normativa de aplicación, etcétera). Puesta en valor de nuevos servicios.
La Hoja de Ruta expone los motivos que sostienen el establecimiento esta décima medida
«Aunque ya se han regulado algunas actividades que dan parcialmente participación a los consumidores en el sistema energético, en particular las relativas al autoconsumo, los servicios de interrumpibilidad o incluso, como promoción del ahorro, los Certificados de Ahorro Energético (CAE), aún queda por desarrollar gran parte del marco normativo que regulará la implementación de los mecanismos de flexibilidad de red y que modelará ese mercado en el que los consumidores, directamente o a través de terceros, accederán a participar de forma activa en el sistema eléctrico, poniendo en valor las aportaciones que podrían hacer a ese sistema a partir de su generación, la modulación de su demanda o la utilización, en función del interés de los gestores de red, de su almacenamiento. Estos nuevos mercados son una oportunidad para incrementar el campo de actividad de las comunidades solares y energéticas, extendiendo su contenido más allá del autoconsumo colectivo y aumentando su potencial de desarrollo»
Hoja de Ruta para el Desarrollo del Autoconsumo Colectivo y las Comunidades Energéticas