"El sector energético ahora mismo es un hervidero", nos contaba a finales de abril Miguel Rodrigo, director de Conocimiento, Desarrollo de Nuevos Modelos de Negocio y Competitividad del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía y alma mater de la Estrategia de Inversiones IDAE 2024-2026. Y parece que tenía razón. El IDAE ha recibido hasta 80 propuestas en los 71 días hábiles que ha habido desde el 12 de abril. "Nos están contactando empresas de todo perfil y de todo sector", ya nos adelantaba a finales de abril Rodrigo, que ha sido hoy el encargado de presentar la Estrategia y que, sin entrar en casos concretos, ha destacado durante su intervención, como ejemplo, el caso de la producción de energía térmica para su empleo en procesos industriales, procesos en los que muchas veces el calor es producido con gas natural y procesos que en muchos casos son de complicada descarbonización: "el almacenamiento térmico en la industria (más de 150-200 grados) tiene un enorme potencial -ha dicho en modo aviso para navegantes- en determinados proyectos industriales" (en alusión seguramente a la termosolar, solución renovable para la descarbonización en esos casos -pues puede producir esas temperaturas y sustituir al gas en esos procesos- y probablemente una de las tecnologías "rompedoras" llamadas a presentar sus credenciales al IDAE, seguramente una de las más acreditadas aspirantes a hacerse con la inversión del Instituto).
El IDAE justifica su rol inversor
«La Estrategia de Inversiones 2024-2026 busca consolidar el papel inversor del IDAE, en coherencia con el Marco Estratégico de Energía y Clima. En su actualización, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima subraya la necesidad de acompañar al sector empresarial e industrial en la transformación del modelo energético con instrumentos que permitan movilizar inversión privada, consolidar modelos de negocio y mostrar las oportunidades económicas que brinda la transición (...). En este contexto, los mecanismos de co-inversión público-privada resultan necesarios (...) para lograr esa movilización inversora y contribuir a la consolidación de tejido industrial y empresarial en toda la cadena de valor. Así, IDAE busca iniciativas de colaboración público-privada vinculadas a la transformación del sistema energético en las que pueda participar con adquisición de capital social, en sociedades vehículo, incluyendo start-ups»
Estas son las "áreas prioritarias de inversión" que recoge la Estrategia 2024-2026 del IDAE
• Movilidad sostenible
• Eficiencia energética en el sector residencial y servicios
• Eficiencia energética en la industria
• Energías renovables
• Almacenamiento, gestión de la demanda y flexibilidad del sistema energético
• Infraestructuras eléctricas
• Hidrógeno renovable
• Economía circular vinculada a la transición energética
• Cadena de valor industrial vinculada a la transición energética
La historia del IDAE como inversor o accionista de empresas "rompedoras" del sector de las tecnologías limpias es larga. Comienza a mediados de los ochenta. Desde entonces, el Instituto ha participado en medio centenar de sociedades que han ido abriéndole el camino a la transición energética. Pero cierto es que ese perfil, más nítido a principios de siglo, se desdibuja con posterioridad, cuando el IDAE relaja esa función para centrarse en otras. Tanto se desdibuja -refería esta mañana el director de Nuevos Modelos de Negocio y Competitividad- que a día de hoy muchos agentes del sector ignoran esa condición además histórica -la de inversor- del Instituto. Pues bien, "esta es la segunda era inversora del IDAE", ha dicho la jefa de Inversiones de esta entidad pública, que ha contextualizado esa nueva era: "nunca antes hubo un cambio de paradigma energético más importante a nivel planetario".
"El campo que tenemos por delante es absolutamente enorme", ha añadido después, en esa línea, el director general del IDAE, Joan Groizard: "no queremos competir -ha querido aclarar-. Buscamos agentes colaboradores y buscamos estar donde aportemos valor, donde haya innovación tecnológica y nuevos modelos de negocio para avanzar en la transición energética. Tenemos 100 millones de euros -ha recalcado- para que el IDAE se convierta en accionista de nuevos vectores y nuevas soluciones energéticas".
El objetivo del IDAE ahora es pues invertir esa dotación de 100 millones de euros de los Presupuestos Generales del Estado y del Plan de Recuperación. Invertirlos para convertirse en "socio minoritario, orientativamente, de entre el 5% y el 20%" de las sociedades en las que invierta. ¿Techo a la participación IDAE en una empresa? 10 millones de euros de participación por proyecto.
El Instituto se propone adquirir así participaciones en el capital social de empresas, startups, sociedades vehículo (SPV), o de nueva creación involucradas en "proyectos vanguardistas" (de todas las áreas prioritarias arriba reseñadas). De forma excepcional -ha añadido Rodrigo-, IDAE podrá valorar también otros instrumentos como préstamos o préstamos participativos.
"Como entidad pública empresarial, el IDAE ha invertido desde los años 80 en proyectos pioneros de tecnologías renovables y ha contribuido -recuerdan desde el Instituto- a acelerar su madurez, escalabilidad y viabilidad comercial". En particular, el Instituto "desempeñó -añaden- un papel protagonista en el desarrollo eólico del país con participación en el capital societario de algunos de los primeros parques, así como en la rehabilitación y construcción de centrales minihidráulicas, plantas de cogeneración y despliegue fotovoltaico".
En la actualidad participa en 25 sociedades con distintas fórmulas de colaboración público-privada o junto a otras entidades públicas. Además de proyectos de corte tradicional, ha incorporado otros perfiles más evolucionados, como startups de gestión de la demanda y microfinanciación para proyectos innovadores en la transición energética, proyectos de hidrógeno renovable o desarrollos de I+D+i como la plataforma de ensayos de energías marinas.
[Bajo estas líneas, sociedades actualmente participadas por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico). El IDAE ha llegado a participar en 49 sociedades. Actualmente solo lo hace en las que aparecen en el cuadro. Fuente: IDAE].
El objetivo de la nueva Estrategia IDAE de Inversiones es apoyar "una cartera equilibrada de tecnologías, empresas y startups con el objetivo de que puedan escalar de una manera clara y viable". Lo ha dicho la ministra Ribera al comienzo del acto y lo ha recalcado luego el director de Conocimiento, Desarrollo de Nuevos Modelos de Negocio y Competitividad del IDAE, Miguel Rodrigo: "queremos ser el músculo financiero de la transición energética", pero atendiendo a proyectos -ha matizado- técnicamente viables y económicamente rentables. "Queremos también atraer inversores de otros países", ha añadido Lozano.
Rodrigo ha concretado los criterios de valoración con los que va a trabajar el Instituto a la hora de seleccionar las empresas en las que va a invertir: viabilidad económica, técnica y jurídica; replicabilidad, escalabilidad y potencial de mercado; y cadena de valor industrial (lo que cabría traducir como impulso a las iniciativas de fabricación de bienes de equipo en el ámbito de las energías renovables, bomba de calor, baterías -en fin, lo que coloquialmente se conoce como cleantech- en territorio nacional).
Así mismo, el director de Conocimiento y Competitividad del Instituto ha especificado las externalidades que busca el IDAE con esta Estrategia de Inversiones: contribución a los objetivos que marca el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima; efecto medioambiental (el alto funcionario del IDAE ha insistido en que serán eliminados los proyectos que no cumplan con el principio DNSH); contribución a la igualdad de género; o actividades de difusión y visibilidad relacionadas con el proyecto de efecto multiplicador.
Tras la presentación de la Estrategia, el Ministerio ha programado un Diálogo entre la directora de Cleantech for Iberia, Bianca Dragomir, y el director general del IDAE, Joan Groizard. De él han salido algunos enunciados y algunos apuntes muy jugosos. El Instituto debe desempeñar -ha dicho su director general, Joan Groizard- el "rol de dar señales" al sector, un sector del que el IDAE ha aprendido mucho y del que tiene todavía mucho que aprender, pero un sector -ha añadido Groizard- que también puede aprender mucho del IDAE, que no en vano lleva ya más de cuarenta años -ha concluido- trabajando e invirtiendo en la transición energética.
La directora de Cleantech for Iberia* ha dejado por su parte tres apuntes que ponen la península ibérica en contexto: (1) "la península ibérica -ha dicho- puede ser el polo de las tecnologías limpias de la Unión Europea"; (2) "ahora mismo hay 500 startups en Cleantech entre España y Portugal"; y (3) las startups cleantech reciben en España un 70% menos de financiación que en Francia y un 76% menos que en Alemania. "Celebramos esta nueva era del IDAE -ha concluido- y vamos a trabajar para acelerar la industrialización verde en España y Portugal, donde tenemos que fabricar, y podemos hacerlo, cemento verde, acero verde, fertilizantes verdes".
*Cleantech for Iberia es una iniciativa de Cleantech Group y está financiado por Breakthrough Energy, el motor de disrupción de Bill Gates. En este marco, otras iniciativas similares son Cleantech for Europe, Cleantech for France, Tech for Net Zero Allianz, Cleantech for Nordics, Cleantech for Baltics y Cleantech for UK.
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