La aprobación definitiva de la orden para la asignación de cuotas de producción a las plantas de biodiésel parecía haber calmado las aguas, pero la nueva decisión del Ejecutivo de Mariano Rajoy, dada a conocer hoy tras el Consejo de Ministros, vuelve a dejar tocada a la industria de los biocarburantes. La rebaja anunciada es sustancial, ya que para 2013 y años sucesivos, el objetivo obligatorio de incorporación de biocarburantes en el transporte pasa del 6,5 al 4,1 por ciento. Por tipo de carburante, el bioetanol no queda tan mal, ya que se rebaja del 4,1 al 3,9 por ciento. Peor parado sale el biodiésel, que cae desde el 7 al 4,1 por ciento.
“Con la rebaja del objetivo obligatorio de biocarburantes para 2013 el Gobierno pone el último clavo en el ataúd del sector del biodiésel en España”. Manuel Bustos, director de la sección de Biocarburantes de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA), ejemplifica el cabreo que se ha adueñado del sector nada más conocer la noticia, que además desconocía por completo: “la decisión aprobada hoy se ha tomado sin ninguna consulta o aviso previo al sector”, aclara.
Baja a la mitad el porcentaje conseguido en 2012
En su comparecencia tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría explicó que “se revisan los objetivos anuales de consumo y venta de biocarburantes para minimizar los precios de venta y favorecer la estabilidad en el sector”. En APPA Biocarburantes afirman todo lo contrario, en especial por la hecatombe que esperan en la industria del biodiésel, “tras haber permitido (el Gobierno) durante años, en detrimento de los consumidores y de los contribuyentes, que las petroleras aprovecharan en su propio beneficio los incentivos fiscales y el dumping derivado de las masivas importaciones ilegales y desleales, lo que ha llevado a la industria española a una lenta y mortal agonía”.
Manuel Bustos advierte de que la rebaja aplicada es realmente mayor de la presentada, ya que “implica rebajar la obligación de biocarburantes un 50 por cien respecto al nivel de consumo conseguido el año pasado (8,2 por ciento), situándola en niveles inferiores a los alcanzados en 2010”. “Esta retrógrada y salvaje reducción –añade– contradice de forma flagrante la senda prevista en la legislación comunitaria para que las energías renovables alcancen en 2020 el 10 por ciento del consumo final en el transporte.” Aunque la Comisión Europea pretende reducir la incorporación de biocarburantes derivados de cultivos al 5 por ciento para la misma fecha, mantiene el global del 10 por ciento para las renovables.
La CNE achaca gran parte de culpa de la subida de precios a los biocarburantes
Definitivamente, la subida de los precios de los carburantes ha marcado la decisión del Gobierno. A pesar de que algunos datos no reflejaban subidas sustanciales tras el fin de la exención del impuesto de hidrocarburos para los biocarburantes, la agencia Europa Press daba a conocer hoy el contenido de un informe de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) que atribuye buena parte de las subidas de enero a la finalización de esas exenciones fiscales. Según estos datos, la gasolina se encareció en 4,1 céntimos, de los que 2,4 céntimos se debieron a dicha medida. Por otro lado, el precio del gasóleo registró subidas de 2,2 céntimos en enero, las primeras en tres meses. De haberse mantenido el tipo cero para los biocarburantes, el precio medio se habría reducido en 0,4 euros el litro, señala el informe.