Fernando Marti, secretario de Estado de Energía, Jaime Suárez, director general de Política Energética y Minas, e Ignacio Grangel, jefe de Gabinete, recibieron el pasado lunes a una delegación del Gobierno de la Junta de Castilla y León para, entre otros temas, abordar el daño que está haciendo el RD 1/2012 en esta Comunidad Autónoma a los proyectos de plantas de biomasa y cogeneración. Entre los miembros del ejecutivo autonómico estaba Ricardo González, también director del Ente Regional de la Energía de Castilla y León (EREN), quien afirmó ayer que el propio Martí les comunicó que “tiene pensado liberar las primas a la biomasa y la cogeneración de pequeña potencia”.
Las declaraciones de González se produjeron durante una tertulia con periodistas celebrada en la feria Expobioenergía, que se celebra del 23 al 25 de octubre en Valladolid. Los representantes de Castilla y León en la reunión del ministerio incidieron en que el Gobierno central no debe tener miedo en que con el levantamiento de la moratoria a la biomasa haya una avalancha de proyectos oportunistas. “Nos preguntaron si hay muchas plantas dispuestas a entrar en tarifa y le confirmamos que en nuestra región no pasamos de los 130 MW (15 instalaciones), y que de ejecución inmediata solo hay 90 MW”, señaló el director del EREN. Por otro lado, incidió en que “lo más importante es que esos nuevos megavatios se convertirían en 2.000 empleos, cuestión relevante que también le expusimos al secretario de Estado de Energía”.
No hay fecha para el levantamiento de la moratoria y las empresas se impacientan
Lo que no precisaron los máximos representantes de la energía en España es la fecha en la que se tiene previsto levantar la moratoria. Para Emilio López, consejero delegado de Gestamp Biomasa, una de las empresas con plantas paradas por los efectos del RD 1/2012, la concreción de una fecha es vital: “la incertidumbre es una forma de matar los proyectos y las inversiones”, afirmó en la tertulia. El caso de Gestamp es uno de los ejemplos más significativos de “cuelgue” tras la aprobación de la moratoria, ya que en diciembre de 2011 había terminado la tramitación administrativa de 60 MW, “y 47 días después nos dicen que se cortan las primas, y aquí estamos esperando a una decisión que vuelva a abrirlas”.
El RD 1/2012 establece en su articulado la posibilidad de un desarrollo normativo que levante la moratoria a algunas tecnologías, entre las que se encuentran la biomasa y el biogás. En la tertulia se expusieron algunos casos de empresas que no han aguantado más la espera de ese desarrollo legislativo, especialmente las extranjeras. Es el caso de la alemana RWE, que tenía prevista la instalación de ocho centrales en España a través de RWE Innogy Iberia Biomasa con una potencia conjunta de 85 MW. La mayoría de los proyectos los ha abandonado y otros los ha vendido a empresas españolas.
La térmica necesita a la eléctrica y la lucha contra los incendios a la biomasa
En Expobioenergía, un año más, dominan las empresas, expositores, jornadas y visitas técnicas que tienen a la biomasa térmica como protagonista, sector al que no le afecta directamente la moratoria. Sin embargo, Javier Díaz, presidente de la feria y de la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom), uno de los organizadores de la cita junto a Fundación Cesefor, “el desarrollo de la biomasa térmica sin otro aparejado de la eléctrica va a resultar cada vez más complicado, porque existe una clara compatibilidad entre ambas en la extracción y logística de los recursos, especialmente en el ámbito forestal, donde se obtienen biocombustibles que no vienen bien para un destino pero sí para el otro”. Carlos del Álamo, decano del Colegio de Ingenieros de Montes de España, Julio Pinto, director de Operaciones del Grupo Matorromera (disponen de una caldera de biomasa en sus bodegas), y José Manuel Jiménez, director general de Calidad y Sostenibilidad Ambiental de Castilla y León, coincidieron también en señalar la importancia de la biomasa como generadora de empleo, desarrollo rural, mejora de la gestión forestal y aprovechamiento de residuos agrícolas.
Carlos del Álamo señaló que “en la actualidad, el aprovechamiento de la biomasa forestal es la única alternativa que tenemos en gran parte de los bosques españoles para mejorar su gestión, crear empleo y reducir los incendios forestales”. “El monte rentable no arde”, concluyó Del Älamo. Jiménez añadió que “el parón de los proyectos eléctricos ha conllevado otro parón en la gestión y logística de los recursos, porque trabajan con una gran volumen de ellos”. Este mismo representante del Gobierno de Castilla y León recalcó que “hace falta un plan nacional de lucha contra los incendios forestales en el que la biomasa juegue un papel determinante, y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente debe pilotar ese plan”.
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