Equo considera que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) "está subordinando las cuestiones de seguridad a las exigencias de las eléctricas, que ven en el alargamiento de las centrales una manera de incrementar los beneficios, ya que el coste de las centrales está amortizado". Por ello, el partido ecologista pide explicaciones al ministro Nadal "sobre las misivas en las que propone al ministro de Energía cambiar la redacción de uno de los apartados sobre las autorizaciones que afectarían a todas las centrales: Almaraz, Ascó I y II, Vandellós II, Cofrentes y Trillo". Según Equo, "este cambio en el articulado de las licencias permitiría que las futuras renovaciones puedan aprobarse sin ningún límite temporal, frente al máximo de 10 años que hasta ahora está estipulado".
Lobby
El coportavoz de Equo y diputado en el Grupo Parlamentario de Unidos Podemos Juantxo López de Uralde ha declarado sobre el particular que "parece que el CSN, en lugar de velar por la seguridad de las centrales nucleares, se ha convertido en una herramienta de lobby para el oligopolio energético". En ese sentido, el diputado se pregunta "¿qué intereses hay detrás de que los permisos de explotación de las centrales se den por un periodo mayor que la revisión periódica de seguridad?". Uralde considera que la materialización de la propuesta de Marti Scharfhausen "supondría de facto aprobar el alargamiento de la vida de las centrales nucleares en España". Por el contrario, el coportavoz de Equo cree que "es necesario y urgente un debate político y social sobre esta cuestión; la ciudadanía tiene derecho a saber los riesgos y las implicaciones de alargar la vida de las nucleares".
Almaraz
Según Equo, "tras dar luz verde a la reapertura de Garoña, la intención del CSN es allanar el camino al resto de centrales nucleares, empezando por Almaraz, cuyo proceso de renovación de licencia comenzará en el mes de julio". Frente a ello, Equo insta al Gobierno "a comenzar la transición energética y apostar por energías más seguras, baratas y limpias, en lugar de seguir ampliando la vida útil de unas centrales a las que les quedaría tan solo una década". Equo informa por otro lado que presentó ayer en el registro del Congreso de los Diputados una pregunta "sobre las cartas que ha enviado el Consejo de Seguridad Nuclear al Ministro de Energía en las que le insta a aprobar un cambio normativo que posibilitaría conceder autorizaciones a las centrales nucleares sin límite temporal (gasta ahora el periodo es por 10 años)".
Este es el contenido de la pregunta registrada ayer en el Congreso
A la Mesa del Congreso de los Diputados
Al amparo de lo establecido en el Reglamento de la Cámara el Grupo Parlamentario Confederal Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, presenta a iniciativa del diputado/ Juan A. López de Uralde las siguientes preguntas relativa a los cambios requeridos por el CSN al Ministerio de Industria en las licencias de las centrales nucleares, dirigidas al Gobierno para las que se solicita respuesta escrita.
Se ha publicado que el presidente del CSN, Fernando Marti Scharfhausen, ha enviado cinco cartas al ministro de Energía, Álvaro Nadal, en las que le solicita que apruebe cambios en el texto de las autorizaciones de explotación de cada una de las centrales nucleares españolas. Unos cambios que servirían para facilitar que las plantas puedan funcionar más allá de los 40 años (hasta los 60 o incluso más, con la única condición de pasar una revisión de seguridad al menos cada década).
Al parecer, en las misivas, el presidente del supervisor nuclear propone al ministro de Energía una nueva redacción de uno de los apartados de las autorizaciones vigentes de todas las centrales del país (Almaraz, Ascó I y II, Vandellós II, Cofrentes y Trillo). Un cambio en el articulado de las licencias que permitiría que sus futuras renovaciones puedan aprobarse por el plazo que el Gobierno considere oportuno (15, 20, 25 años…) o incluso sin ningún límite temporal, frente al máximo de 10 años que hasta ahora estaba fijado.
Las modificaciones servirían para incluir nuevos requisitos de seguridad para que las plantas gestionen el envejecimiento de las instalaciones por funcionar a largo plazo, y se mantienen otras de las exigencias habituales para renovar una licencia. Estas cartas suponen dar como un hecho consumado el alargamiento de la vida de las centrales nucleares más allá de 60 años.
Por todo esto, se pregunta
- ¿Es el Gobierno conocedor de estas misivas?
- ¿Va el Gobierno a cambiar las autorizaciones de explotación de las centrales nucleares para permitir el alargamiento de su vida útil?
- ¿Supone esto, de facto, que ya se está autorizando el alargamiento sine die de la vida de las centrales nucleares?
- ¿No considera el Gobierno necesario un debate político y social sobre esta cuestión?