Piccard ha explicado que se está construyendo el avión solar con el que pretende dar la vuelta al mundo, un periplo que podría hacerse en 20 ó 25 días. La idea es comenzar el viaje a finales de 2012 o principios de 2013, siempre que el proyecto se desarrolle en los tiempos planificados. Aún no se ha diseñado la ruta y se habla de un vuelo de prueba hasta Marruecos con parada en España. Piccard ha hablado de Valencia, pero sin concretar.
Se cuenta con la experiencia del primer viaje en avión impulsado por motores eléctricos abastecidos de la energía generada por paneles solares. El viaje se produjo el pasado mes de mayo. En 26 horas se cubrió una ruta entre Suiza y Bélgica sin parar. Es decir, la tecnología fotovoltaica fue capaz de generar suficiente electricidad para que el avión volase y hubiese el excedente necesario para que Solar Impulse surcara el cielo de noche en ausencia de radiación solar consumiendo la electricidad acumulada en las baterías.
Un ascensor solar
Schindler es una de las empresas que colaboran en el proyecto Solar Impulse y al igual que Bertrand Piccard prepara novedades para el año próximo. Según ha sabido Energías Renovables, en estos momentos la compañía está en período de patente y prueba de un ascensor solar. Cuando se supere esa etapa la intención es aprobar un proyecto empresarial para la comercialización y fabricación de ascensores alimentados por energía solar en 2012.
En un principio, la idea de Schindler es fabricar los componentes del ascensor en las factorías que tiene distribuidas en diferentes países, cada una de las cuales está especializada en determinados elementos. Por ejemplo, la fábrica de Schindler en Zaragoza se podría encargar de la producción de los motores, que es el elemento que produce habitualmente.