Dichas metas, a la espera de ser reglamentadas, contarán para un período mínimo de 10 años, y serán desdobladas en metas individuales, de cumplimiento anual, para los distribuidores de combustibles, según sea la participación que tengan en el mercado de combustibles fósiles.
RenovaBio es presentada desde el Ministerio de Minas y Energía (MEM) como "una de las más avanzadas legislaciones ambientales para el sector de los combustibles con vistas al cumplimento del Acuerdo de París".
Se abunda en que "RenovaBio es una política de Estado que, por primera vez, busca trazar una estrategia conjunta para reconocer el papel de todos los tipos de biocombustibles (etanol, biodiésel, biometano, bioquerosene etc.) en la matriz energética brasileña, tanto en lo que se refiere a su contribución para la seguridad energética, con previsibilidad de oferta para el abastecimiento, como para la mitigación de la reducción de emisiones de gases causantes del efecto invernadero en el sector de los combustibles".
Para el ministro del área, Fernando Coelho Filho, la sanción de la ley "reafirma el compromiso del país con el incentivo al desarrollo de las energías renovables y su vocación de liderazgo en el sector, ahora también confirmada en las últimas subastas (de energía)".
"La ley RenovaBio significa una energía nueva para un sector que es prioritario para el país y que necesitaba del estímulo en la dirección correcta", agregó Coelho Filho.
RenovaBio prevé la certificación individual de la producción de biocombustibles, que tiene como objetivo medir la exacta contribución de cada agente productor para el alivio de las emisiones de gases de efecto invernadero en relación a su sustituto fósil.
Además, la ley crea el CBIO (crédito de descarbonización), que une las metas de reducción de emisiones y la evaluación por ciclo de vida de cada productor de biocombustible. El CBIO será un activo financiero, negociado en bolsa, emitido por el productor de biocombustible, a partir de la comercialización. Los distribuidores de combustibles cumplirán con la meta al demostrar la adquisición de estos CBIO.
Producción y consumo de biocombustibles
Según datos oficiales, Brasil es el segundo productor y consumidor mundial de biocombustibles. En 2017, se produjeron 27.700 millones de litros de etanol y 4,2 mil millones de litros de biodiésel. Los biocombustibles, en conjunto con la bioelectricidad, componen la primera fuente renovable, con participación del 18% en la matriz energética nacional.