Durante esta misma semana, la planta más moderna de producción de bioetanol de primera generación de Abengoa Bioenergía, y la que presenta un mejor balance en eficiencia energética y emisiones de gases de efecto invernadero, empezará a moler grano en el puerto de Rotterdam (Holanda). “Es posible que en junio funcione a plena capacidad”, añade Domínguez Abascal. Dentro de su exposición sobre el apartado de innovación de la compañía, señaló también que, aunque en Babilafuente existe una planta piloto de bioetanol de segunda generación, será en Hugoton (Kansas, Estados Unidos) donde se construya la primera planta comercial.
Estados Unidos como principal lugar de expansión
¿Por qué España, que tiene la tecnología, no se queda también con el desarrollo comercial e industrial? “Por cuestiones de regulación y financiación”, sentenció Domínguez Abascal, quien informó que la planta de Hugoton “contará con financiación directa del Gobierno de Estados Unidos, ya que entra en el plan de estímulo de las energías renovables impulsado por el presidente Barack Obama”. Dentro de esta sinergia que ha encontrado Abengoa con el país norteamericano se enmarca también un plan de I+D sobre bioenergía, en el que se invirtieron 24 millones de dólares el pasado año y donde colabora económicamente el Departamento de Energía.
Aparte de lo reseñado en el ámbito de los biocarburantes, la inversión más importante que Abengoa realizará próximamente se centra en dos grandes plantas termosolares en Estados Unidos: Solana (280 MW) y Mojave Solar (250 MW). Según el director financiero, Amando Sánchez Falcón, “calculamos que la cifra total puede estar por encima de los 2.000 millones de dólares”. Argelia es otro país donde Abengoa desarrollará una de sus innovaciones más punteras: la primera planta del mundo de tecnología híbrida termosolar-ciclo combinado, de 150 MW. En España, las tres Solnova (1, 3 y 4) de Sanlúcar La Mayor (50 MW cada una), en Sevilla, siguen adelante gracias al acuerdo con varias entidades bancarias europeas.
Las termosolares se construirán, pero con ajustes
Donde no se empieza a ver el horizonte tan claro es en las diez restantes plantas termosolares que entraron en el registro de pre-asignación del régimen especial. Las dos Helioenergy (1 y 2) de Écija (Sevilla) se están construyendo y, gracias a la participación de Eon en el proyecto, tienen prácticamente cerrada la financiación. No ocurre lo mismo con Helios 1 y 2, en Ciudad Real, Solacor 1 y 2, en El Carpio (Córdoba), y Solaben 1, 2, 3 y 6, en Badajoz. “Solo las pondremos en marcha cuando tengamos asegurada la financiación externa de estos proyectos”, dice Sánchez Falcón, quien reconoce que Abengoa acusa como todos los efectos de la incertidumbre de la regulación pero también pronostica que “estamos seguros que saldrán adelante con algún ajuste”.
La distribución de ventas por zonas geográficas del pasado año en todas las áreas de negocio de Abengoa fue mayor fuera de España que en el interior: 69% frente a 31%. La diferencia tiende a agrandarse, según comentaron en la reunión de esta mañana. Además de los incentivos económicos que ofrecen otros países, como Estados Unidos, también influyen otros criterios empresariales. Javier Camacho Donézar, director de Desarrollo Estratégico Corporativo, recordó que “aparte de la regulación, lo que nos mueve a decantarnos por otros países es la oportunidad de sentar las bases para el desarrollo de las energías renovables, en especial la solar”. En este aspecto, además de los proyectos en Estados Unidos y Argelia, se mencionaron otros en Marruecos, Oriente Medio, China, Sudáfrica y Australia