Para el ministro, con la incorporación del biodiésel elaborado sobre la base del aceite de soja, “se fortalecerán 5.000 empleos y se beneficiarán miles de pymes de las economías regionales”, además sostuvo que “los productores locales podrán incrementar sus ingresos en unos 700 millones de pesos (182 millones de dólares), con una producción que ascenderá a 742 millones de litros de biodiesel”.
El anuncio oficial contó con la presencia de funcionarios del gobierno, representantes de las empresas miembros de la Cámara Argentina de Biocombustibles (CARBIO), de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno (AABH) y demás instituciones y empresas del sector.
El presidente de CARBIO, Fernando Peláez, consideró que “esta medida cambiará la matriz energética y colocará al país como uno de los líderes mundiales en la producción de biocombustibles”.
Por su parte, Claudio Molina, presidente de AABH, destacó que la iniciativa además de ser “muy positiva, sustituye importaciones”, y no debería implicar un aumento del gasoil. Agregó también que “es un paso adelante en materia de diversificación de la matriz energética y se está incorporando un combustible renovable, además se está haciendo en todo el mundo”.