Susana Díaz ha ganado las elecciones autonómicas andaluzas. Tanto las ha ganado como se las ganó Esperanza Aguirre a Manuela Carmena en mayo de 2015; tanto ha ganado la candidata socialista en Andalucía como ganó Inés Arrimadas en las autonómicas catalanas, cuando fue la suya la lista más votada. Pero no, Díaz no gobernará Andalucía. Como no gobiernan Aguirre en Madrid o Arrimadas en Cataluña. Victorias inútiles que abrieron y abren escenarios en los que los protagonistas son otros (¿defenderán ahora Rivera y Casado que gobierne la lista más votada?). Vox tampoco colocará a su candidato en la presidencia de la Junta. Porque tampoco Vox ha ganado las elecciones. En realidad, solo uno de cada diez votantes (algo más: 10,9%) ha elegido esa marca: 395.978 votos sobre un total de casi tres millones setecientas mil papeletas ayer depositadas; 395.978 votantes Vox sobre un total de 6.541.722 votantes potenciales.
Vox ha titulado su programa electoral 100 medidas para la España Viva. Solo en cuatro de esas medidas alude a la energía, tantas veces calificada por unos partidos y otros como "cuestión de Estado". Son estas.
Medida 38. Desarrollar un Plan de la Energía con el objetivo de conseguir la autosuficiencia energética de España sobre las bases de una energía barata, sostenible, eficiente y limpia.
45. Menos impuestos y costes regulados en la factura de la luz, que son los culpables de que paguemos uno de los recibos más caros de Europa.
54. Rebajar los impuestos directos del gasóleo agrícola.
72. Establecer bonificaciones proporcionales al número de miembros de las familias en todo tipo de suministros básicos como luz o gas o el acceso a bienes culturales.
Ahí está toda la política energética que el partido que lidera Santiago Abascal ha introducido en su programa.
Extracto del resto del programa de Vox (100 medidas para la España Viva)
Medida número 1 del programa electoral de Vox. Suspensión de la autonomía catalana hasta la derrota sin paliativos del golpismo y la depuración de responsabilidades civiles y penales.
5. Supresión de las policías autonómicas.
7. Intensidad y determinación en las acciones diplomáticas para la devolución de Gibraltar.
8. Plan integral para el conocimiento, difusión y protección de la identidad nacional y de la aportación de España a la civilización y a la historia universal, con especial atención a las gestas y hazañas de nuestros héroes nacionales.
9. Derogación inmediata de la Ley de Memoria Histórica.
12. Supresión de las cuotas (por sexo o por cualquier otra causa) en las listas electorales.
14. Deportación de los inmigrantes ilegales a sus países de origen.
16. Revisión de los tipos penales (y endurecimiento de sus penas) para combatir a las mafias de la inmigración ilegal, así como para quienes colaboren con ellas, ya sean ONGs, empresas o particulares.
26. Fortalecer nuestras fronteras. Levantar un muro infranqueable en Ceuta y Melilla.
27. Incrementar el presupuesto de Defensa.
39. Cerrar las televisiones autonómicas.
56. Suprimir en la sanidad pública las intervenciones quirúrgicas ajenas a la salud (cambio de género, aborto…).
59. Eliminación del acceso gratuito a la sanidad para inmigrantes ilegales.
66. A nivel cultural fomento del arraigo a la tierra, manifestaciones folclóricas y tradiciones de España y de sus pueblos dentro de la óptica de la Hispanidad.
67. Impulsar una ley de protección de la tauromaquia, como parte del patrimonio cultural español.
70. Derogación de la ley de violencia de género (...). Supresión de organismos feministas radicales subvencionados.
71. Creación de un Ministerio de Familia. Promulgación de una ley orgánica de protección de la familia natural.
75. Defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural. Es fundamental que las mujeres con embarazo inesperado tengan información veraz.
84. Ley de memoria dignidad y justicia para las víctimas del terrorismo.
85. Creación de un memorial de las víctimas del terrorismo.
87. Desarticulación efectiva de ETA.
95. Eliminación del Jurado.
99. Creación de una Agencia para la ayuda a las minorías cristianas amenazadas.
Comunicado de Vox sobre la fiesta del Orgullo Gay (05 de julio de 2018)
"La celebración del “orgullo gay” se ha convertido, en los últimos años, en una imposición institucional, un problema de convivencia y en la causa de la vulneración de los más elementales derechos de las poblaciones donde se lleva cabo".
"La oficialización de un acto en el que un colectivo privado pero con subvenciones públicas celebra el orgullo que le causa una práctica sexual concreta ha llevado a que se extienda de su día inicial a ocupar más de una semana, a que se invierta mucho dinero público en ello, a invadir lugares públicos y a utilizar tanto instituciones como recursos municipales, dando lugar a posibles abusos e irregularidades en la gestión de todo ello".
"La lamentable colaboración de todos los partidos del ámbito parlamentario en esta trama de intereses, que se han volcado para garantizar que unos colectivos minoritarios vulneren con impunidad desde normas municipales hasta derechos fundamentales de la mayoría".
"Exigimos que los artífices y colaboradores de todos los partidos políticos implicados se hagan responsables de este tipo de actuación de las administraciones, amparadas únicamente por motivos ideológicos y filiaciones personales".
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