Según explica el ministerio en un comunicado, la convocatoria se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y está específicamente diseñada para potenciar la creación de nuevos establecimientos industriales, ampliar las capacidades productivas en plantas ya existentes y reconvertir líneas de producción que fabriquen productos innovadores que antes no se producían.
La primera fase de ayudas tiene como objeto la ejecución de planes de inversión correspondientes a la Sección A de baterías del Perte VEC, con un presupuesto total de 280 millones de euros, de los cuales 180 millones se instrumentarán en forma de préstamos reembolsables y 100 millones en forma de subvenciones directas.
La sección A de baterías del Perte VEC apoya, específicamente, la producción de baterías destinadas al vehículo eléctrico, la producción de componentes esenciales de las baterías y la producción o recuperación de materias primas fundamentales para la producción de dichas baterías.
A esta primera fase de ayudas le seguirá, posteriormente, una segunda dirigida a la cadena de valor. Las ayudas podrán solicitarse por parte de sociedades mercantiles con personalidad jurídica propia y los préstamos tendrán un tipo de interés fijo del 2,727%, un plazo de amortización de 10 años y tres años de carencia.
El Perte VEC fue aprobado en julio de 2021 y está basado en la colaboración público-privada y el fortalecimiento de las cadenas de valor de la industria de automoción español, con la finalidad de crear el ecosistema necesario para el desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos y conectados a la red y convertir a España en el Hub Europeo de electromovilidad.
Hasta la fecha ha puesto en marcha hasta ahora tres convocatorias que han movilizado cerca de 2.500 millones de euros, beneficiando a unas 300 empresas que representan toda la cadena de valor de la automoción.