Según informa Solarig, la operación se ha cerrado "tras varios meses de negociación, una vez se ha clarificado la situación de la energía de origen FV en Italia, y tras las turbulencias regulatorias que el sector ha vivido en los últimos meses".
En ese sentido, el grupo señala que ha contado con el apoyo de diversas entidades financieras, "como Grupo Intesa, Fineco o ING, y con el asesoramiento de los estudios legales Norton Rose y Agnioli Giugioli y los asesores técnicos Protos e ICIM". Por otra parte, y, al igual que para el resto de los plantas fotovoltaicas de Solarig, la gestión económico-administrativa de dichos activos se ha encargado a la empresa Altrium Energy, especializada en la gestión societaria, financiera y de contratos de activos de generación de energía a partir de fuentes renovables.
Los proyectos han sido ejecutados –informa Solarig– "utilizando equipos y materiales de suministradores de primera fila y siguiendo los más altos patrones de calidad constructiva; así mismo, la operación y mantenimiento de estos parques será realizada por la empresa del grupo Solarig Italia Operation and Maintenance durante los próximos 20 años". Con esta adquisición, Solarig asegura que se consolida "entre las empresas líderes en el campo de la generación fotovoltaica con una potencia instalada en propiedad superior a 60 MW en Italia".
El Grupo Solarig, que opera actualmente en una quincena de países, se define como "un productor independiente de energía renovable, especialista en fotovoltaica, cuyo modelo de gestión flexible está basado en la integración vertical y el uso de diferentes tecnologías, lo que le convierte –señala– en uno de los referentes mundiales en el desarrollo, financiación, construcción y operación de plantas FV, con una potencia total de 100 MW en Europa, principalmente en Italia, Francia y España". Solarig declara una cartera de proyectos en desarrollo de más de 300 MW "a realizar en los próximos años".
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