El campo solar -informa el Gobierno- estará compuesto por 158.400 módulos fotovoltaicos de 315 vatios de potencia cada uno. Según el Ejecutivo castellano-manchego, el presupuesto total de ejecución supera los 33 millones de euros. Además, el proyecto incluye la instalación de una treintena de inversores de 1.500 kva, una quincena de centros de transformación de 3.000 kva, tres líneas subterráneas de alta tensión de 20 kv (de conexión entre los centros de transformación y la subestación de 47 MVA), un centro de transformación auxiliar de 50 kva, y una línea de evacuación de la subestación Planta Solar a la subestación CH Castrejón de 132 kv, con una longitud de 162 metros bajo el suelo y 1.968 metros aéreos.
Castilla-La Mancha presume de ser la primera comunidad autónoma del país en potencia fotovoltaica instalada. En total, o sea, incluyendo la potencia nuclear, eólica, termosolar y de otras tecnologías, la región tiene 8.723 megavatios, de los que el 68% es energía renovable. La comunidad, que preside el socialista Emiliano García-Page, produce más de 22.000 gigavatios hora al año y consume en torno a 11.000 GWh/hora. El Gobierno regional ha anunciado que, "de cara al próximo año 2018", destinará 4,5 millones de euros en "ayudas a la mejora de la eficiencia energética, en el aprovechamiento de las energías renovables y a la reducción de las emisiones contaminantes a la atmósfera, que se suman a los más de seis millones que ya se han destinado desde el inicio de la Legislatura". García-Page fue investido presidente de Castilla-La Mancha el 1 de julio de 2015, con los 15 votos a favor del PSOE y los dos de Podemos, y los 16 votos en contra del Partido Popular.
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