La feria ha tenido lugar en un momento agridulce, en el que coinciden una crisis financiera global –que está afectando considerablemente al sector– con un momento (el que vive la industria nacional) moderadamente dulce: la eólica española –promotores y fabricantes– está presente (puertas afuera) en 27 países de los cinco continentes y, puertas adentro, suma ya una potencia instalada, en España, de más de 16.000 MW, ha llegado a cubrir el 11,5% de la demanda eléctrica española y se consolida como la cuarta tecnología en generación del mix eléctrico.
Sea como fuere, la Feria Internacional de la Energía Eólica (Wind PowerExpo) ha reunido esta semana en las instalaciones feriales zaragozanas a representantes de 19 países “para conocer las innovaciones y los productos de las 206 empresas que han participado en la cita”. Según los organizadores, “a falta de una valoración definitiva, alrededor de 8.000 profesionales vinculados a la energía del viento han pasado por la feria”, que ha servido –añade Feria de Zaragoza– “para afianzar la apuesta de la institución ferial zaragozana en materia energética, con la celebración de este certamen, segundo eólico más importante en Europa y el único en España”.
Pero, más allá de lo estrictamente ferial, en Zaragoza también ha habido jornadas técnicas, todo un congreso (sobre hidrógeno), foros de encuentro (como el hispano-turco, en el que expertos de ambos países han ahondado acerca de la posibilidad de abrir nuevos mercados) y visitas institucionales, como la del gobernador de Maine (Estados Unidos), la directora de la consejería de Industria y Energía del Condado de Rudong (China), o la del consejero de Industria, Comercio y Turismo del gobierno de Aragón, Arturo Aliaga.
La legislación y el empleo
Precisamente este último aprovechó la inauguración de Wind PowerExpo para anunciar –como ya había adelantado Energías Renovables en una entrevista exclusiva– que “a finales de año estará listo el decreto firmado con Red Eléctrica de España” gracias al cual el gobierno aragonés sacará a concurso a principios del año que viene 1.400 MW. La noticia, que ha sido bien acogida por el sector, no ha disipado sin embargo la principal preocupación de la Asociación Empresarial Eólica, que ha manifestado en Zaragoza que necesita conocer cómo va a ser la legislación nacional que va a sustituir a la actual para poder así emprender el proceso de adaptación.
Más allá de esa incertidumbre, el sector parece gozar de una relativa buena salud, al menos según lo apuntado en las jornadas "Busca empleo en la eólica" que ha organizado la AEE en el marco de Wind PowerExpo. Testimonio de ello ha dejado Guillermo Arregui, del Instituto Sindical de Trabajo Ambiente y Salud (Istas) de Comisiones Obreras. Según Arregui, el sector eólico emplea directamente a más de 32.000 trabajadores, lo que supone más de un 36% del total del sector de las renovables. Más aún: Arregui ha asegurado que para el año 2020 habrá cerca de 50.000 personas trabajando en el sector de la energía del viento.
Por su parte, Jean Philippe Nadier, de la consultora de recursos humanos Ginko, ha señalado en Wind PowerExpo que en el conjunto de la Unión Europea hay alrededor de 155.000 empleos, tanto directos como indirectos, vinculados a la energía eólica, de los cuales el 75% están concentrados en los tres países pioneros, España, Alemania y Dinamarca. Además, Jean Philippe ha señalado en Zaragoza que la energía eólica genera quince puestos de trabajo anuales por cada megavatio instalado y ha añadido que para 2030 habrá 375.000 personas trabajando en este sector en Europa, de las cuales casi dos terceras partes lo harán en instalaciones offshore (eólica marina).
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