“Pure player” dicen los ingleses. Jugador puro en el sector de las renovables, que vuela sin el lastre de las tecnologías convencionales, abocadas más pronto o más tarde a plegar velas y decir adiós. Acciona Energía es el mayor operador global de renovables no vinculado a las eléctricas. Apostaron solo por las energías limpias, por todas las energías limpias, y en esas siguen, dispuestos a demostrar a quien sea –por si alguno no se ha caído del guindo todavía– la viabilidad técnica y económica de un sistema energético sostenible basado en renovables.
Y para ello, la empresa que controlan los Entrecanales –más del 50% de las acciones están en manos del grupo familiar– dedica 190 millones de euros a inversión en I+D+i, un ratio muy alto para los números de Acciona, que logró el año pasado 1.192 millones de ebitda, el 62% procedente de Acciona Energía. 9.000 MW instalados en propiedad, que serán 9.500 a final de año, y 2.000 MW instalados para terceros; 21 TWh de producción; 2.000 empleados en 20 países; y el objetivo de añadir entre 400 y 500 MW nuevos cada año. Mientras llegan, su electricidad limpia alumbra ya 6 millones de hogares en todo el mundo, o sea, unos 30 millones de personas. En España producen el 6% de la generación. De los 4.748 MW eólicos que Acciona tiene en España, 2.700 MW están habilitados por Red Eléctrica para ofrecer servicios de ajuste. Y el objetivo a corto plazo es llegar a los 3.500.
Potencia instalada en junio de 2017
Rafael Mateo, CEO de Acciona Energía, dice muchas cosas mientras desgrana los datos. “El sector eléctrico es un sector de oficio, de experiencia. Un sector que se sustenta en los activos y las personas”. Y en esta empresa hablar de energía es hablar solo de renovables. “Hace unos años nuestra voz era la única que clamaba en el desierto para demostrar la viabilidad de un modelo basado en renovables”. Las cosas han cambiado para todos, so pena de quedarse fuera de juego, pero Acciona tiene ventajas frente a otras empresas: “nosotros no tenemos que deshacernos de muebles viejos”. Por eso, por verse libre de energía sucia, Acciona encabeza el ránking Energy Intelligence de las Top 100 Green Utilities del mundo por segundo año consecutivo.
“Nuestro crecimiento está enfocado fuera de España. En lugares como Norteamérica, que consideramos un mercado clave, o Australia, con muchas oportunidades. En 2020 tendremos más capacidad instalada fuera que dentro”, señala Mateo. “No vamos a ser los más grandes pero sí queremos ser los primeros”. Y para eso invirtieron el año pasado 62 millones en innovación en energía.
“En España no vemos de momento mucho mercado. Hay que retirar antes muebles viejos. Y si no lo hacemos es imposible llegar a esa pretendida transición energética”, insiste el CEO de Acciona Energía. “Y el sistema que no tome decisiones probablemente lo acabe pagando. Hay que atreverse a cerrar cosas, pero yo sigo viendo defensores del carbón. Y hay que cambiar otras muchas. Por ejemplo, no tiene sentido que sigamos pagando interrumpibilidad a clientes a los que nunca se les va a interrumpir el suministro eléctrico”. Para Acciona las opciones en España pasan por contratos bilaterales (PPA) y que los mercados marginalistas se queden para ajustes.
Almacenamiento: más integración de renovables
Las renovables son intermitentes. Sí, lo sabemos. Es una de las coletillas preferidas de los que buscan ponerlas en la diana siempre que pueden. Pero las soluciones para evitar los problemas derivados de esa falta de continuidad están en marcha desde hace tiempo y con magníficos resultados. Por un lado, la predicción. “Somos capaces de predecir las producción renovable a 2 ó a 7 días vista con más precisión que la del regulador del sistema eléctrico para conocer la demanda a 2 ó 7 días”, apunta el CEO de Acciona Energía. A los desarrollos en predicción, que permiten hilar cada vez más fino, se une ahora el almacenamiento. Por otra parte, nada nuevo para las renovables, que saben desde hace tiempo lo que es un sistema de bombeo hidráulico, y más recientemente, un depósito de sales fundidas para almacenar el calor de una planta termosolar que es capaz de generar electricidad 24 horas al día a partir del sol.
La planta de almacenamiento eólico de Barásoain, la primera de España de estas características, es un nuevo hito en esta carrera de saltos tecnológicos que van superando las energías renovables, y que permitirá integrarlas más y más en el sistema. “Acciona no va a invertir en baterías, para eso trabajamos con proveedores”, explica Belén Linares, directora de Innovación e I+D de Acciona Energía. “Lo que estamos haciendo es desarrollar nuestro propio sistema de control, y ocuparnos de la integración, el desarrollo del proyecto, la ingeniería y construcción, y la operación”.
Precios en caída libre
Acciona lleva cinco años trabajando en sistemas de almacenamiento y el software específico para su diseño, optimización y gestión. Ya opera dos plantas piloto, una con fotovoltaica, cerca de Tudela (Navarra) y la recién inaugurada planta eólica de Barásoain, que ha supuesto una inversión de un millón de euros. El almacenamiento avanza importantes beneficios. Por un lado va a permitir más penetración de renovables, contribuirá a estabilizar la red y a regular la producción, ajustando mucho más los desvíos y sus costes derivados. “En los próximos 7 años el almacenamiento en el mundo se multiplicará por 10. Desde los 4,6 GW de capacidad actual a 45, 1 GW. Y estamos convencidos de que la curva de aprendizaje de las baterías bajarán aún más rápido que las de la fotovoltaica (han caído un 80% desde 2009) porque las baterías tienen otros muchos usos, por ejemplo, el de los vehículos eléctricos”.
Consultoras como Bloomberg Energy Finance o Information Handling Systems han hecho estimaciones sobre los precios del almacenamiento entre 2015 y 2020. Para la primera pueden reducirse hasta en un 48%. La segunda se queda en una reducción de costes del 37%. Pero estamos hablando de cinco años. “En 2030 será más barato aportar potencia en horas punta con baterías que con ciclos combinados”, explica Rafael Mateo.
El máximo responsable de Acciona Energía se ha pronunciado en muchas ocasiones en contra de las subastas en España. “Son muy atípicas. Nosotros nos presentamos a subastas en otros países, públicas y privadas. Pero aquí no le veo sentido, no se subasta nada. Los ganadores van a tener que ir también a mercado, a pool. Y eso lo puedes hacer sin necesidad de pasar por una subasta. Es verdad que tienen un suelo pero es muy bajo. Y además, te lo pueden mover al cabo de unos años. Las subastas son más bien para empresas que, o quieren introducirse en este sector, o están cortas de renovables y necesitan potencia en energías limpias”.
