La introducción viene a cuento de la noticia que indica que investigadores de varias instituciones de Estados Unidos, entre ellas la Universidad de Illinois, y una de China han desarrollado un dispositivo piezoeléctrico que implantado en un órgano del cuerpo en constante movimiento es capaz de producir suficiente electricidad para hacer funcionar un marcapasos u otro dispositivo implantado.
En un artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS, en español Procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias) el equipo describe la naturaleza de su dispositivo y cómo se podría utilizar en el futuro.
En la actualidad, cuando la batería dentro de un dispositivo como un marcapasos se queda sin energía, los pacientes deben someterse a una cirugía para reponerla. Dispositivos que aprovechan partes naturales del cuerpo para permitir la creación de electricidad internamente se han ideado, de modo que puedan funcionar para toda la vida, y así evitar la necesidad de cirugía adicional.
Sin embargo, la mayoría de estos dispositivos han sido demasiado pequeños para cargar un dispositivo real, ya que muchos están todavía en fase de investigación. En este caso, el equipo de investigación ha desarrollado la idea de crear una planta de energía en miniatura aunque lo suficientemente grande como para alimentar los dispositivos implantables reales.
El nuevo dispositivo tiene nanocintas que están hechas de circonato-titanato de plomo o PZT, recubiertas de plástico biocompatible flexible. El dispositivo se adhiere directamente en el corazón, pulmón o partes de diafragma, todos órganos que están en constante movimiento, lo que hace que las cintas se doblen ligeramente, lo que a su vez provoca la creación de una pequeña cantidad de electricidad .
Hasta el momento, los dispositivos han sido probados en vacas y otros grandes animales, y el equipo informa de que son capaces de crear electricidad suficiente para alimentar un marcapasos u otro dispositivo implantable de forma indefinida.