panorama

China concentra el 30 % del empleo del sector energético a nivel mundial

0
China concentra más del 75% de la fabricación de paneles solares. China lidera el empleo eólico terrestre con más del 40% del total de puestos de trabajo en todo el mundo, seguida de Europa con el 20%. China sigue dominando la cadena de suministro de baterías. El gigante asiático alberga la mayor fuerza laboral del sector energético, en concreto casi el 30% del total mundial. Datos que se reflejan en el último informe ´Empleo Energético Mundial` de la Agencia Internacional de la Energía (IEA), que señala que en el año 2022 se crearon 4,7 millones de empleos a nivel mundial en el sector renovable.
China concentra el 30 % del empleo del sector energético a nivel mundial

El fuerte crecimiento de las inversiones en las energías limpias (+40 %) de los últimos años ha provocado -y sigue provocando- un crecimiento de las empresas para atraer más trabajadores. En el año 2022, se crearon 4,7 millones de empleos a nivel mundial en el sector renovable, llegando así a un total de 35 millones de empleos. En comparación, en el mismo periodo, los empleos de combustibles fósiles crecen en 1,3 millones y se mantienen en los 32 millones. Es decir, las energías renovables cuentan con más trabajadores que los combustibles fósiles. En total, el sector energético alcanzó casi 67 millones de empleos en 2022, según el último informe ´Empleo Energético Mundial` de la Agencia Internacional de la Energía (IEA). "Los empleos en energías limpias fueron el principal impulsor del crecimiento del empleo en energía en prácticamente todas las partes del mundo durante los últimos tres años", cita dicho informe.

Más de la mitad del crecimiento del empleo desde el 2021 se debe a la energía solar fotovoltaica, eólica, vehículos eléctricos (EV) y fabricación de baterías, bombas de calor y minerales críticos. Estos cinco sectores emplean hoy a alrededor de 9 millones de trabajadores, siendo la energía solar fotovoltaica la que encabeza el listado con alrededor de 4 millones de puestos de trabajo. La construcción es con diferencia el sector que más empleo genera en el sector fotovoltaico y representa casi la mitad (50 %) de los puestos de trabajo del sector en todo el mundo, mientras que la fabricación de polisilicio, obleas, células, módulos e inversores, así como bastidores, montajes y otros componentes, representa alrededor del 20 % del empleo total. China, donde se fabrica la inmensa mayoría de los paneles solares del mundo, concentra más del 75 % de estos empleos. En 2022, la capacidad de fabricación de energía solar fotovoltaica creció casi un 40 %, y casi todo ese crecimiento se produjo en China.

La fotovoltaica junto a la eólica aportaron más del 60% del crecimiento de 2022. Una tecnología, la del viento, en la que más de la mitad de los puestos de trabajo se encuentran también en la región de Asia-Pacífico, con China representando por sí sola el 40 % del total mundial. Fuera de Asia, América Central y del Sur están experimentando un rápido crecimiento del empleo en energía eólica, con más de 20.000 puestos de trabajo en tierra en 2022, ya que la región se prepara para añadir más de 25 gigavatios (GW) de nueva capacidad en los próximos cinco años, principalmente en Brasil, Chile y Colombia. La mano de obra en África también se está expandiendo rápidamente, en más del 75 % en 2022, con el apoyo de varios proyectos en Sudáfrica. Los proyectos en tierra representan aproximadamente el 80 % de todos los empleos eólicos, aunque el empleo en alta mar está creciendo a un ritmo similar. China y Europa dominan la eólica marina, representando juntas más de dos tercios del empleo mundial en 2022. China lidera el empleo eólico terrestre con más del 40 % del total de puestos de trabajo en todo el mundo, seguida de Europa con el 20 %, y luego América del Norte y América Central y del Sur con aproximadamente el 10 % cada una.

El eléctrico va creciendo
La fabricación de vehículos eléctricos y sus baterías fue la mayor fuente de crecimiento, añadiendo a nivel mundial más de 1 millón de puestos de trabajo desde 2019. Según se señala en el informe de la IEA, se están desarrollando nuevas instalaciones de baterías en todo el mundo, con un aumento de la capacidad de fabricación de baterías de vehículos del 50 % en 2022 y un incremento del empleo en la fabricación de baterías de casi el 20 %. Aunque China sigue dominando la cadena de suministro de baterías, en 2022 se estaban realizando inversiones por valor de más de 73.000 millones de dólares en plantas de fabricación de baterías en Estados Unidos, impulsadas por las medidas del IRA.

En definitiva, ha quedado demostrado que China alberga la mayor fuerza laboral del sector energético, en concreto casi el 30 % del total mundial. Durante el período 2019-2022 los empleos en energías limpias crecieron en 2 millones y los empleos relacionados con los combustibles fósiles cayeron en 600.000, en gran parte en carbón. Hoy en día, el 60 % de la fuerza laboral energética de China está empleada en sectores limpios, en comparación con poco más del 50 % en 2019. Los sectores de fabricación de energía limpia de China emplean aproximadamente a 3 millones de trabajadores, lo que representa el 80 % de los empleos de fabricación de baterías solares fotovoltaicas y vehículos eléctricos a nivel mundial.

Sin embargo, la bioenergía concentra en Brasil, Indonesia y Estados Unidos algo más del 30% de los 3,6 millones de personas que trabajan en el sector en todo el mundo. Esto incluye el cultivo de materias primas, su procesamiento, la construcción y explotación de instalaciones de producción de biocombustibles y biogás, y el suministro de esos combustibles al mercado. Sin embargo, se excluye la producción de pellets de biomasa, el procesamiento de residuos y desechos de cultivos y la producción de carbón vegetal. Alrededor del 40 % de todos los empleos de este sector están relacionados con el cultivo y procesamiento de materias primas.

Empleo femenino
En la actualidad, las mujeres representan menos del 20 % de la mano de obra mundial del sector energético, muy por debajo de la media mundial del 40 %. El porcentaje de mujeres en puestos de alta dirección en las principales empresas energéticas es similar al de la economía en general, en torno al 18 %, según el Gender and Energy Data Explorer de la AIE. Reducir el desequilibrio de género depende, en parte, de que aumente el número de mujeres que acceden a programas de formación profesional o educativa relacionados con la energía, que siguen estando dominados por los hombres. En Estados Unidos, el número de mujeres licenciadas en estos campos está aumentando ligeramente, mientras que la proporción de mujeres que obtienen títulos de grado en STEM está ganando terreno de forma más significativa, situándose por encima del 40 % tanto en India como en Estados Unidos a partir de 2020. Esto contrasta fuertemente con la Unión Europea, donde la proporción de titulaciones STEM concedidas a mujeres se ha mantenido relativamente plana en torno al 15 % desde 2013. "Para cerrar la brecha de género en el empleo también es necesario aumentar los niveles de participación de las mujeres en la construcción y la industria manufacturera, que representan una parte significativa de los puestos de trabajo en el sector de la energía y siguen estando dominados por los hombres", defiende el informe.

Trabajadores más cualificados
El sector energético necesita trabajadores más cualificados que la mayoría de las otras industrias: el 36 % de los empleos en el sector energético se encuentran en ocupaciones altamente cualificadas según las definiciones de la Organización Internacional del Trabajo, en comparación con el 27 % en la economía en general. Las ocupaciones de la construcción, que representan casi la mitad de los nuevos empleos relacionados con la energía hasta 2030, enfrentan una escasez particularmente aguda, lo que limita la disponibilidad de mano de obra necesaria para instalar tecnologías de energía limpia y modernizar edificios.

El informe señala también que la mitad de los trabajadores de los sectores de combustibles fósiles que enfrentan riesgos de despido en esta década podrían cambiar a nuevos roles con alrededor de cuatro semanas de capacitación adicional dedicada, como los 1,2 millones de trabajadores que podrían pasar de la calefacción con combustibles fósiles a bombas de calor y los 4 millones de trabajadores que podrían pasar de la fabricación de motores de combustión interna a los vehículos eléctricos de aquí a 2030. El empleo en el carbón se redujo en 225.000 puestos de trabajo entre 2019 y 2022 y se espera que se contraiga aún más en 1,4 millones de puestos de trabajo. Por ejemplo, las regiones carboníferas en declive pueden ayudar a transferir a estos trabajadores a otros sectores, como los minerales críticos, ya que en los últimos tres años se crearon más de 180.000 puestos de trabajo en la minería de minerales críticos, y el 40 % de los mineros de carbón actuales trabajan dentro de un radio de 200 kilómetros de un depósito de minerales críticos.

Sobre el salario
La Agencia Internacional de la Energía (IEA) también habla de la remuneración en el sector energético, que suele ser más alta que en ocupaciones similares en la economía en general, lo que refleja principalmente mayores requisitos de cualificación. Por ejemplo, los instaladores de energía solar fotovoltaica pueden ganar alrededor de un 15 % más que los techadores generales y un 40 % más que los instaladores de telecomunicaciones, ocupaciones que requieren habilidades comparables. "Aún así, los salarios varían mucho en el sector energético y las diferencias salariales podrían crear obstáculos para los traslados de trabajadores dentro del sector energético y podrían contribuir a que algunos trabajadores abandonen por completo el sector energético", añade el informe. Hoy en día, los trabajadores de la energía nuclear, el petróleo y el gas se benefician de algunos de los salarios más altos de toda la economía, y algunas tecnologías de energía limpia ofrecen salarios comparables, como es el caso del procesamiento de biocombustibles, mientras que en otras, como la eólica, la solar y el hidrógeno, el trabajador promedio gana entre un 15 % y un 30 % menos en la actualidad.

En definitiva, según las políticas actuales, se crearán 8 millones de empleos en energías limpias en todo el mundo para 2030, y los empleos relacionados con los combustibles fósiles disminuirán en 2,5 millones, lo que representa un aumento neto de 5,7 millones. El aumento de los empleos en el sector energético hasta 2030 sería aún mayor en el escenario NZE, alcanzando los 17 millones. El apoyo a los trabajadores en los sectores de combustibles fósiles en declive debe ir de la mano con esfuerzos para capacitar a los trabajadores necesarios en los sectores de energía limpia, ya que la escasez de mano de obra calificada se está convirtiendo en uno de los principales riesgos para las transiciones energéticas.

Artículos relacionados
´Empleo Energético Mundial` de la Agencia Internacional de la Energía (IEA)

Añadir un comentario
Baterías con premio en la gran feria europea del almacenamiento de energía
El jurado de la feria ees (la gran feria europea de las baterías y los sistemas acumuladores de energía) ya ha seleccionado los productos y soluciones innovadoras que aspiran, como finalistas, al gran premio ees 2021. Independientemente de cuál o cuáles sean las candidaturas ganadoras, la sola inclusión en este exquisito grupo VIP constituye todo un éxito para las empresas. A continuación, los diez finalistas 2021 de los ees Award (ees es una de las cuatro ferias que integran el gran evento anual europeo del sector de la energía, The smarter E).