Costó encontrar el hueco, pero lo encontramos, antes de que finalizase el año, justo para que la entrevista pudiese entrar en la edición especial –el Anuario 2010– que hemos enviado a nuestros suscriptores en este mes de enero que empieza a languidecer. Ellos fueron los primeros en leer lo que nos contó Alfonso Beltrán García-Echániz, el nuevo director general del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía.
Pues bien, hoy hemos colgado en nuestro sitio, en la red, todo lo que ya publicáramos en el papel, en nuestra edición de enero, en la que también incluimos por cierto una veintena de artículos de opinión firmados por las voces clave del panorama español de las renovables. Pero estábamos con Echániz, así que vayan por delante, como aperitivo, cinco preguntas, por ejemplo, de las muchas que le hicimos.
¿Puede el gobierno legislar en materia de energía o acaban marcando las pautas las grandes empresas del sector?
Mal gobernante sería aquel que no tuviera en consideración al sector de riqueza más importante, o uno de los más importantes, que tiene este país. Eso no significa que gobierne al dictado. Mire, el peso de ciertas compañías es impresionante. Pero para bien. Un seleccionador de fútbol haría muy mal en no jugar como juegan los mejores jugadores que tiene la selección.
¿Cuándo verá la luz el plan de energías renovables 2011-2020?
El PER 2005-2010 se aprobó en agosto de 2005... Mire, para sacar un plan 2011-2020 lo primero que había que hacer era evaluar muy claramente su antecesor, evaluarlo y aprender de esa experiencia. Yo daría por bien invertidos un par de meses más si sacamos lecciones muy claras del lustro anterior y alumbramos al final una planificación que tenga la capacidad de ir detectando las señales para poder ir orientándose.
¿Cuál es la asignatura pendiente del IDAE?
Convencer a los ciudadanos, o sensibilizarlos suficientemente, para que vean la energía como otro bien escaso, como el agua. Todo el mundo tiene clara esa escasez cuando ve un pantano vacío, pero no sucede lo mismo con la energía, y eso tenemos que solucionarlo.
Tras el milagro de la eólica, el de la fotovoltaica y el de la termosolar… ¿llegará el del coche eléctrico?
Creemos que esa puede ser otra sorpresa agradable en los próximos años.
¿Y qué hay de la biomasa?
Tenemos que ir no tanto a la producción de electricidad con biomasa, como a los usos térmicos.