El vehículo ya no es solo un medio de desplazamiento, sino una fuente de datos y eficiencia que, bien gestionada, puede generar rentabilidad. Y es que, aunque el sistema aún tiene retos por delante, la clave para aprovechar esta nueva vía de ingresos está en contar con las herramientas adecuadas para medir, certificar y monetizar. Y ahí, la tecnología de empresas como Next Mobility, que pretende valorizar cada kilómetro de conducción eficiente.
Hasta hace poco, los Certificados de Ahorro Energético (CAE) eran una herramienta poco conocida fuera del ámbito profesional. Sin embargo, el crecimiento del parque de vehículos electrificados, híbridos enchufables y flotas conectadas ha abierto una nueva vía de aplicación en el sector de la automoción. Un vehículo que optimiza su consumo energético —gracias a tecnologías de eco-conducción o a una gestión eficiente de rutas— también puede generar ahorros certificados.
La clave para obtener estos ingresos está en contar con dispositivos telemáticos OBD-II embarcados, que registran con precisión los datos de uso del vehículo y su eficiencia. Estos dispositivos, ampliamente usados en la gestión de flotas, permiten cuantificar el ahorro energético, certificarlo y, posteriormente, ponerlo en valor económico.
Ahora bien, para que esos ahorros puedan convertirse en ingresos reales, es necesario contar con un sistema oficial de verificación. En España, este proceso se canaliza a través del Sistema TRAZO (Trazabilidad Operativa de Ahorros Energéticos), una herramienta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) que proporciona acceso a datos geográficos de diferentes áreas temáticas, como cartografía general, agua, calidad y evaluación ambiental, entre otros.
Sin embargo, solo los datos registrados mediante tecnología homologada, capaz de medir consumo, eficiencia y uso en tiempo real, pueden ser reconocidos oficialmente y traducidos en CAE válidos, explica Next Mobility. Este proceso está concretamente regulado por la ficha oficial ‘TRA20’, incluida en el catálogo de actuaciones reconocidas por el Ministerio. Esta ficha valida el uso de dispositivos OBD-II embarcados como herramienta certificada para calcular el ahorro energético individualizado en vehículos. Gracias a esta metodología, flotas y usuarios pueden generar CAE con base en datos reales y trazables, avalados por normativa estatal.
De los datos al ingreso: monetizar hasta 150 euros por vehículo al año
Es aquí donde entran en escena compañías tecnológicas como Next Mobility, ya que su plataforma de análisis predictivo y conectividad IoT, no solo permite a las empresas conocer y optimizar en tiempo real el rendimiento de sus vehículos, sino también certificar la reducción de emisiones y monetizar el ahorro energético de forma automatizada, con un impacto económico de hasta 150 euros anuales por vehículo.
Además de la rentabilidad generada por los datos de eficiencia energética obtenidos por dispositivos homologados , la tecnología de Next Mobility permite acelerar la obtención de otros documentos clave para la transición energética, como la certificación de huella de carbono, necesaria para acceder a Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), bonificaciones fiscales o cumplir con objetivos ESG.
Credenciales de Next Mobility:
Next Mobility es una empresa de desarrollo de tecnología de movilidad basada en el análisis de datos que ofrece herramientas digitales para la gestión de flotas. Next Mobility está desarrolla sus avances tecnológicos en el marco del PERTE VEC, gracias al que puede seguir innovando en inteligencia artificial, modelos predictivos y optimización energética con el objetivo de contribuir al futuro de la movilidad conectada y eficiente.
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