Con la intención de adherirse al Convenio del Agua de la ONU, República Dominicana ha empezado a tomar medidas para garantizar la sostenibilidad de sus recursos naturales por medio de una mejor conservación, gestión y uso sostenible de sus aguas transfronterizas, según ha informado la Comisión Económica de la ONU para Europa (UNECE), auspiciante de ese instrumento internacional.
El país caribeño comparte varias cuencas transfronterizas con Haití y esos recursos son
fundamentales para el bienestar de la población, la salud de los ecosistemas y el desarrollo económico, al ser necesarios en la agricultura, la energía, la industria y el uso doméstico. En relación a la energía, República Dominicana cuenta con 27 centrales hidroeléctricas, que suman 613.81 MW de potencia, cubriendo entre el 10 y el 11% de la electricidad que demanda el país.
La secretaria del Convenio del Agua, Sonja Koeppel, argumentó que ese instrumento puede proporcionar un marco muy útil para trabajar en la conservación de las cuencas y la mitigación del impacto del cambio climático en República Dominicana, a través de la gestión integrada y sostenible de las cuencas. “El Convenio del Agua puede ofrecer su marco único y 30 años de experiencia sobre el terreno en multitud de contextos para ayudar a afrontar esos retos”, afirmó.
Uso razonable y equitativo del agua compartida
El Convenio del Agua es un marco jurídico intergubernamental de las Naciones Unidas que cuenta con 47 Partes y que exhorta a prevenir, controlar y reducir los impactos negativos sobre la calidad y la cantidad del agua a través de las fronteras, así como a usar las aguas compartidas de forma razonable y equitativa, y a garantizar su gestión sostenible mediante la cooperación.
De adherirse al Convenio, República Dominicana se beneficiaría del apoyo internacional para el desarrollo sostenible y podría reforzar la estabilidad y la paz. Además, la nación insular se posicionaría como un líder regional para la conservación de los recursos naturales.
Región rica en agua
América Latina y el Caribe es una de las regiones del mundo más ricas en recursos hídricos en la que 22 de sus 33 países comparten aguas transfronterizas, ya sea lagos, ríos o acuíferos: el 71% del flujo total de agua superficial en la región proviene de cuencas hidrográficas compartidas.
De acuerdo con la UNECE, la región no está bien encaminada hacia el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible referente a la gestión integrada de los recursos hídricos, incluso mediante la cooperación transfronteriza, pese a que los países que la integran se comprometieron con la Agenda 2030.
En este sentido, la adhesión de Republica Dominicana podría catalizar un impulso a la cooperación en materia de agua en toda la región.