Estos paneles híbridos (aH60 y aH72) ya están funcionando a pleno rendimiento en diferentes instalaciones de Granada, Toledo, Málaga o Gerona y en proyecto hay varios más para fuera de España, según indican desde Abora Solar. Utilizan una tecnología –la última en hibridación, según la compañía– que consigue reducir al mínimo las perdidas térmicas del panel, además de maximizar la producción eléctrica gracias a la refrigeración que se obtiene de las células fotovoltaicas.
Según la empresa, estas son sus principales ventajas:
• La producción eléctrica puede llegar a ser hasta un 12% más que un fotovoltaico de las mismas dimensiones y características (por la acción refrigerante del líquido que circular por el panel).
• La producción térmica es la misma que un panel térmico de las mismas dimensiones y características.
• Se reduce a la mitad el área de instalación de paneles (cubiertas y tejados), siendo el más adecuado para edificios con poca cubierta.
• Dado a su alto rendimiento, se obtienen amortizaciones de la instalación completa desde el cuarto año de su instalación, empezando a obtener beneficios a partir del quinto año, contando que estos paneles pueden tener hasta 25 años de vida.
Desde la compañía añaden que su instalación es idónea en edificios con un elevado consumo de agua caliente y/o calefacción, además de luz, como es el caso de hoteles, residencias, centros deportivos y hospitales.
Abora Solar (anteriormente Abora Energy) recibió en noviembre el Premio Iberus Emprende, del Campus de Excelencia, dotado con 7.000 € a la empresa más innovadora surgida de las universidades del Valle del Ebro. En la actualidad cuenta con un equipo de 20 personas.