El mantenimiento preventivo de instalaciones fotovoltaicas es aquel que se hace de manera programada para evitar posibles incidencias antes de que ocurran. Este tipo de mantenimientos se realizan en los diferentes componentes del sistema híbrido fotovoltaico.
Baterías
Para alargar la vida útil de las baterías en un sistema fotovoltaico es necesario mantenerlas a la temperatura adecuada indicada por el fabricante; para ello hay que adecuar la temperatura del recinto donde se alojan. Estos recintos pueden ser armarios, casetas o, en el caso de los sistemas de Desigenia, contenedores. Para ello se instala un sistema de climatización que permita regular la temperatura así como medirla para encender o apagar los sistemas de ventilación y mantener el espacio a la temperatura idónea. “En el caso de las soluciones de eficiencia energética de Desigenia, se utilizan los sistemas de ventilación forzada, free-cooling, que permiten reducir o eliminar el uso de aires acondicionados, ahorrando en costes energético y reduciendo aún más la huella de carbono”, explica la empresa del Grupo SME.
Comprobar el estado de las baterías en todo momento es imprescindible para saber si están funcionando correctamente y ver si hay que realizar algún tipo de mantenimiento. Para ello se conectan a un sistema de control que envía alarmas al software al que estén conectados para revisar su estado. Con este sistema de supervisión se puede saber en tiempo real el estado de carga (para el funcionamiento del sistema fotovoltaico) así como la temperatura a la que están. Dependiendo del estado se pueden accionar diferentes elementos de manera remota para que las baterías no se descarguen completamente ni se calienten y puedan provocar alguna incidencia.
Grupos electrógenos
Un mantenimiento preventivo en los grupos electrógenos es fundamental para que funcionen de manera adecuada las 24 horas. En los sistemas híbridos de Desigenia, estos grupos electrógenos funcionan de back up, encendiéndose de manera automática cuando la energía solar no sea suficiente para abastecer el sistema y cargar baterías. En este caso, el grupo electrógeno recarga las baterías y se vuelve a apagar. También se enciende en el caso de que no haya energía solar durante varios días, para que el sistema siga funcionando y no se provoque ninguna caída.
Para que los generadores diésel trabajen de manera correcta, hay que programar ciertos mantenimientos. Es el caso del combustible, estos grupos deben repostarse cada cierto tiempo para no quedarse sin gasóleo. Además del repostaje, hay que tener en cuenta los componentes del grupo electrógeno, realizando los mantenimientos oportunos cada 1.000 horas de funcionamiento aproximadamente. “En Desigenia contamos con una plataforma web, Argos, donde se planifican los mantenimientos, se ve el estado de los grupos electrógenos en tiempo real y se programan los mantenimientos de acuerdo al estado de los generadores.
Los sistemas híbridos fotovoltaicos además están compuestos por otros componentes: inversores, paneles solares, unidades de ventilación, etc. Pero las baterías y los grupos electrógenos son los que necesitan un mantenimiento preventivo más programado. El resto de componentes se supervisa de manera remota con el sistema de alarmas conectado al NOC y, en caso de alguna alarma, se corrige antes de que se provoque ninguna incidencia.
