"El norte de Queensland cuenta con abundantes recursos eólicos y solares, grandes extensiones de tierra poco pobladas y mano de obra cualificada y especializada en la construcción y operación de proyectos de infraestructura energética a gran escala". Así comienza la nota de prensa que ha elaborado Iberdrola para anunciar el que presenta como su mayor parque eólico terrestre del mundo, una instalación de mil megavatios que va a elevar su cartera australiana por encima de los 3.000 MW y que está llamada a desempeñar "un papel importante -explica la compañía- en el cumplimiento del objetivo de descarbonización de la economía del país, que contempla un 50% de energías renovables para 2030 en Queensland". La empresa que preside José Ignacio Sánchez Galán destaca además el potencial que tiene esta zona de convertirse en lo que presenta como "un importante centro de hidrógeno verde y corredor de exportación de materiales verdes".
En ese sentido -apuntan desde la compañía-, a medida que se vayan desmantelando los casi 25.000 MW de generación térmica de carbón y salgan del Mercado Nacional de Electricidad, se requerirá una inversión significativa para sustituir toda esa capacidad de generación.
Mount James encajaría en ese contexto. "Ya se han completado los estudios medioambientales en las 50.000 hectáreas del emplazamiento del proyecto eólico Mount James -señalan desde Iberdrola-, que van a permitir diseñar el parque eólico evitando las zonas sensibles desde el punto de vista medioambiental o patrimonial". Asimismo -asegura la eléctrica-, se están tramitando todos los permisos para construir el proyecto.
Con la operación ahora anunciada (Mount James), Iberdrola declara en Australia más de tres gigavatios (3 GW) de "cartera de proyectos de varias tecnologías, en diferentes etapas de desarrollo". Sus proyectos están situados en los estados de Nueva Gales del Sur, Australia del Sur y Queensland.
Su proyecto más emblemático es quizá Port Augusta, en Australia del Sur, una planta híbrida, que combinará un parque eólico de 210 MW y un campo solar de 107. La compañía estima generará electricidad equivalente a la demanda anual de 180.000 hogares australianos. Iberdrola venderá la energía producida por Port Augusta a clientes industriales del país.
Los números de un gigante
Iberdrola produce, distribuye y comercializa electricidad, declara una plantilla de más de 35.000 personas y unos activos superiores a 122.000 millones de euros. La compañía ha declarado 3.885 millones de euros (M€) de beneficio neto en 2021 (+8% con respecto a 2020; +14% con respecto a 2019), más de 12.000 M€ de beneficio bruto de explotación (nunca antes logró una cifra similar); y casi 10.000 M€ de inversión (récord histórico también). Los principales accionistas de esta empresa son el fondo soberano de Catar (Qatar Investment Authority), el fondo estadounidense Black Rock Inc y el banco público noruego Norges Bank.
Según los datos facilitados por la propia compañía, Iberdrola suministra energía a cerca de 100 millones de personas, principalmente en España, Reino Unido (ScottishPower), Estados Unidos (Avangrid), Brasil (Neoenergia) y México, y tiene también oficinas "y una amplia cartera de proyectos de energía limpia" en Australia, Alemania, Francia, Japón, Italia, Polonia, Suecia, Irlanda, Taiwán, Vietnam y Grecia. Iberdrola presume de ser "el primer productor eólico y una de las mayores compañías eléctricas por capitalización bursátil del mundo". Este es su parque global de generación de electricidad.
