La principal conclusión del estudio -explican desde Asealen- es "la imperiosa necesidad de un instrumento de apoyo económico a las instalaciones de almacenamiento para alcanzar los objetivos marcados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima". El informe técnico-económico de las dos tecnologías (BESS y PSH) explica (1) cómo estas instalaciones garantizan la estabilidad del sistema eléctrico español y (2) cómo hacen posible la integración en el mismo de las energías renovables que, en sus modalidades más extendidas, eólica y solar fotovoltaica, presentan la limitación de una producción no gestionable, puesto que ambas dependen de factores no controlables, como son el viento y la radiación solar, respectivamente.
Los autores del estudio concluyen que los sistemas de almacenamiento no son rentables en el marco regulatorio actual en España, donde los ingresos están limitados al arbitraje de mercados (lo que marca el mercado) y a la prestación de determinados servicios de ajuste. Los expertos han explicado que la incorporación de modificaciones en el sistema regulatorio, tales como la remuneración adecuada de la totalidad de los servicios (servicios de ajuste adicionales) que presta el almacenamiento y la definición de "remuneración a largo plazo", por el valor estratégico que supone tener la capacidad de responder ante las necesidades del sistema (mecanismo de capacidad) podrían asegurar el desarrollo de los proyectos necesarios.
En la jornada también se ha puesto de manifiesto la necesidad de simplificar y clarificar la tramitación administrativa de estos proyectos, tal y como se ha llevado a cabo con los proyectos de generación renovable. Especial hincapié se ha hecho en la dificultad de obtener la concesión de agua para los bombeos hidroeléctricos, con avances lentos en su tramitación y la aplicación de criterios no homogéneos por parte de las Confederaciones Hidrográfica. También se ha discutido sobre la falta de capacidad de acceso a red disponible para los proyectos de almacenamiento, teniendo que competir con los proyectos de generación, suponiendo en múltiples casos una paralización de facto de la tramitación ambiental y administrativa de los proyectos por no disponer de ese acceso.
Yann Dumont, presidente de Asealen: “la situación actual del sistema eléctrico nacional nos permite afirmar que, sin el despliegue inmediato de tecnologías de almacenamiento de energía, España no puede alcanzar los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima y encontraremos situaciones delicadas en el sector energético. El almacenamiento no puede vivir solamente del precio de mercado porque ni es sostenible que alguien tenga que retribuirse de la volatilidad (que nadie quiere) ni es suficiente para un inversor como ha demostrado el estudio. Se requiere un marco regulatorio que lo haga económicamente viable. Nuestro papel, como asociación de referencia en este ámbito, es aportar las propuestas concretas que hemos presentado hoy”
Asealen
La Asociación Española de Almacenamiento de Energía (Asealen) es una entidad constituida por 34 socios y presidida por Yann Dumont. Comenzó su andadura en 2020 y actúa como portavoz de los promotores/usuarios de los sistemas de almacenamiento, involucrando a fabricantes, consumidores finales, redes de transporte/distribución y empresas de energía renovable, para potenciar el uso del almacenamiento de energía con todas las tecnologías disponibles.