Prospecciones petrolíferas como las que ha llevado a cabo Repsol en Canarias -explica Greenpeace- "siempre producen una importante contaminación acústica que afecta a las especies animales de la zona, ya sea por el ruido de los barcos o por la caracterización del fondo y del subsuelo mediante el uso de sonar de barrido lateral y por el uso de perfilador de fondo y perfilador acústico vertical". La organización ecologista destaca en ese sentido que "Repsol impidió en diciembre que científicos canarios se acercarsen a la zona para tomar medidas de los niveles de ruido en el lugar". Además -continúa Greenpeace-, hay que añadir la contaminación química "producida por los lodos de perforación, los ripios o materiales extraídos del pozo que han sido vertidos al mar por toneladas y la movilización de contaminantes del subsuelo, además del riesgo que ha existido en todo momento de vertido accidental".
Científicos
Según la organización ecologista, "las prospecciones en aguas canarias fueron desaconsejadas totalmente por científicos españoles e internacionales, ya que se realizaban en un frágil ecosistema de características únicas". Además -añade Greenpeace-, fueron ejecutadas en medio de "un amplio rechazo social e institucional". A pesar de ello, el Gobierno central ha permitido a la multinacional buscar petróleo en la zona, "incluso -denuncia Greenpeace- a costa de vulnerar leyes y directivas europeas, lo que ha provocado que colectivos e instituciones canarias denunciaran el caso en Bruselas y que actualmente está en investigación tanto por el Parlamento como por la Comisión Europea".
Repsol Armada
Greenpeace denuncia, así, que "el Gobierno central ha puesto los intereses de Repsol por encima de los de la ciudadanía y que incluso ha destinado un buque de la Armada, pagado por todos los ciudadanos, para proteger las operaciones de la multinacional privada, como quedó de manifiesto el pasado 15 de noviembre, tras las embestidas que sufrieron las embarcaciones de los activistas de Greenpeace que denunciaban las prospecciones pacíficamente". Según la organización ecologista, Canarias alberga 30 especies de cetáceos, 28 de ellas observadas en el área de las prospecciones, al este de Fuerteventura y Lanzarote. Al menos 11 de ellas viven todo el año en la zona, además de contar con tortugas marinas de seis especies distintas y una importante riqueza en sus fondos marinos.