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Fernando Romero, director general de EiDF Solar

“Seremos la primera compañía de autoconsumo cotizada”

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Fernando Romero es un vasco de Rentería que eligió vivir del sol de Galicia, y que lo ha conseguido: vivir del Sol. De Galicia. Empezó a montar instalaciones fotovoltaicas para autoconsumo cuando el PP, el partido que siempre baja los impuestos, deletreaba uno nuevo: al Sol… nada menos. Pero Romero no se arredró en la tierra de Rajoy y Feijóo, y montó allí un autoconsumo (en Pontevedra), y luego otro, y luego otro, y otro más… y ahora EiDF Solar tiene delegaciones repartidas por toda España y es Top 1 del sector a escala nacional. Romero no quiere subvenciones; no le teme a la nueva factura eléctrica —“nos hace mucho más interesantes”—y no se arruga cuando le anuncian nuevos actores en el horizonte: “aquí les esperamos. Welcome to the jungle!”.
“Seremos la primera compañía de autoconsumo cotizada”

EiDF está a punto de debutar en el BME Growth, el mercado alternativo bursátil para empresas en expansión. Lo va a hacer tras lograr cerrar en marzo una suscripción de ampliación de capital de 12 millones de euros entre más de 60 inversores. ¿Por qué? ¿Para qué?
Es lo que demanda el curso natural de nuestros objetivos conforme vamos cumpliéndolos. Desde 2018 hemos experimentado un crecimiento continuo. Somos la empresa de referencia en autoconsumo y, con el objetivo de ampliar nuestra oferta y consolidar nuestra expansión a nivel nacional, decidimos hace 2 años comenzar el proceso de salida a cotización y entrar en el mercado de capitales para convertirnos en la primera compañía de autoconsumo cotizada. Esto nos permitirá conseguir la financiación adecuada para reforzar nuestro modelo de negocio a través del autoconsumo y crecer en unidades que rodean la actividad principal, el alma de nuestra compañía: el autoconsumo. Así, reforzaremos el autoconsumo con otras dos nuevas unidades de negocio para completar la cadena de valor hacia nuestros clientes: (1) generación y (2) comercialización de energía 100% renovable y adaptada a nuestra cartera de clientes.

EiDF declara una cartera de cerca de seiscientos megavatios [600 MW], con los que ha anunciado que cubrirá, aproximadamente, el 10% del total de la demanda de energía de sus clientes. ¿Es así?
Hemos iniciado actividad en la generación fotovoltaica con el objetivo de construir y gestionar nuestros propios parques para producir energía 100% renovable, que será suministrada a nuestra cartera de clientes de autoconsumo a través de nuestra comercializadora Prosol Energía. Esta ampliación viene motivada por la identificación de unas necesidades concretas entre nuestros clientes de autoconsumo en el ámbito de la energía. Actualmente contamos con una extensa cartera de clientes (2.000) que presentan un importante consumo energético post autoconsumo (aproximadamente siete teravatios hora) que, evidentemente, no se cubre con el autoconsumo de las instalaciones realizadas, así que ofreceremos a nuestros clientes la posibilidad de completar su consumo mediante la contratación de un servicio de suministro energético con nuestra comercializadora, proporcionándoles energía 100% solar para el desarrollo de su actividad. La nueva oferta de generación fotovoltaica y su comercialización se circunscribirá en exclusiva a este grupo de clientes, prosumidores, actuales y futuros, que han apostado por la energía fotovoltaica, la reducción de costes y, en parte, por la autosuficiencia eléctrica, con una visión sostenible, adaptada y, por supuesto, rentable.

Entiendo pues que Prosol Energía solo se dirige a los autoconsumidores clientes de EiDF Solar.
Prosol Energía es nuestra comercializadora de energía 100% solar, y ha sido creada con el propósito de dar servicio a nuestros clientes autoconsumidores. Contará con una oferta integral en comercialización eléctrica adaptada a cada cliente. Prosol pondrá en el mercado una propuesta única y dirigida en exclusiva a clientes prosumidores fotovoltaicos a través de la gestión de los excedentes de producción, soluciones de telemedida, precios ajustados y dando a los usuarios control global sobre sus costes energéticos a medio plazo. [Sobre estas líneas, instalación de autoconsumo ejecutada por EiDF para su cliente Pescanova, en Chapela, Galicia].

EiDF Solar es pionera del autoconsumo en España. La primera instalación que puso en marcha se aproxima ya a los diez años de operación. ¿Algún apunte sobre el particular? ¿Sigue EiDF Solar vinculada a esa instalación, prestándole quizá servicios de mantenimiento?
Así es. Nuestra primera instalación fue en 2011 en una empresa avícola gallega. Es una instalación de 263 kilovatios pico y 1.905 módulos que produce, aproximadamente, 300.000 kilovatios hora de energía limpia al año. La instalación genera energía para el apoyo y funcionamiento de la planta de procesado, evitando la emisión de cerca de 115 toneladas de CO2 anuales. El cliente amortizó la inversión realizada en 5 años y medio y, desde ese momento, el coste por la energía que produce es cercano a 0. Teniendo en cuenta la vida útil de las instalaciones fotovoltaicas, el cliente no pagará por la energía producida gracias a los paneles solares durante el resto de los años que le quedan por delante a la instalación. Y sí, seguimos ocupándonos de las operaciones de mantenimiento y control del funcionamiento desde que se puso en operación.

Entiendo que, si el cliente sigue confiando en EiDF diez años después, es porque está satisfecho… Pregunto, en todo caso, ¿grado de satisfacción?
Alto. Es una empresa ubicada cerca de nuestras oficinas centrales. Somos vecinos y la comunicación y trato con el cliente es constante. Gracias a ese contrato, pudimos acceder a nuevas obras en ese sector y en Galicia.

¿Cuántas instalaciones de las puestas en marcha por EiDF Solar a lo largo de todos estos años están ya amortizadas?
El tiempo medio de amortización está en los 5 años. En torno al 35-40% de las obras realizadas ya cumplieron su payback. Hay que tener en cuenta que nuestro volumen de instalaciones comenzó a crecer de manera exponencial a partir de 2017. El grueso de las obras se concentra en los últimos años. 

El Gobierno derogó el impuesto al sol hace ya casi tres años. Y las comunidades autónomas, poco a poco, van desmontando las trabas burocráticas que habían ido ideando para ralentizar el desarrollo del autoconsumo. Así, por ejemplo, cada vez son más los gobiernos autonómicos que eliminan como requisito para montar una instalación de autoconsumo la obligación de solicitar una licencia de obras. ¿Qué queda por desanudar para liberar por completo al autoconsumo de lastres administrativos innecesarios?
Aun hay cosas que mejorar para garantizar un correcto desarrollo del sector: simplificar la tramitación administrativa que ahora le exigen a las instalaciones de más de cien kilovatios pico [100 kWp], apostar por la digitalización de todos los trámites administrativos requeridos, homogeneizar las normativas autonómicas, una mayor definición en lo que respecta al autoconsumo compartido, Registro de Autoconsumo Nacional, etc. Parece que hemos avanzado, y cierto que es así, aunque no como esperábamos, salvo en segmentos muy concretos que, por desgracia, no es donde está la mayor actividad en estos momentos, por lo que también nos deberíamos hacer esa pregunta: ¿por qué se puede considerar la existencia de una “barra libre” para un segmento concreto del autoconsumo y los demás, o más concretamente, las instalaciones de empresas de potencia media, siguen padeciendo un procedimiento administrativo de hace 20 años? En todos los sectores, por desgracia, siguen existiendo intereses de todo tipo, tanto intrínsecos como extrínsecos.

El Consejo de Ministros acaba de aprobar, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, un plan de ayudas por valor de hasta 900 millones de euros al autoconsumo. Fernando Romero nunca ha sido muy partidario de las subvenciones. ¿Lo es ahora? ¿Son necesarias? ¿Es preferible destinar ayudas a ese objetivo que a la construcción por ejemplo de grandes centros de producción de hidrógeno verde, ese gas que será competitivo dentro de diez años? En fin: ¿cómo lo ve ahora el director general de EiDF?
No soy partidario de las subvenciones a fondo perdido y mucho menos en el momento de madurez actual de la tecnología y sus precios. Efectivamente siempre lo he manifestado así. Intervenimos el sector de manera ineficiente y damos señales que ralentizan el crecimiento natural de un sector competitivo. El sector es competitivo por sí mismo y no necesita de este tipo de estímulos, que provocan un efecto llamada atemporal, no sostenible en el tejido industrial, así como eventual, causando la entrada de empresas en busca de la oportunidad de negocio que no ofrecen ningún valor añadido al sector. Lo idóneo, como ya están haciendo en algunas comunidades autónomas, es la promoción de desgravaciones fiscales al autoconsumo en el IBI [impuesto sobre los bienes inmuebles], el impuesto de sociedades o el IAE [impuesto sobre las actividades económicas]. Necesitamos visibilidad a medio y largo plazo, no inyecciones de liquidez. Es verdad que el mercado nos ofrece soluciones (ayudas) y, como empresa, acudimos y participamos en ese sistema, pero para cumplir los objetivos que tiene España, lo urgente es darnos facilidades a nivel burocrático y administrativo en los trámites requeridos.

¿A cuánto se está vendiendo el autoconsumo industrial?
El precio ha bajado notablemente desde que empezamos e hicimos nuestra primera instalación. Depende de la potencia, pero estamos un 40% por debajo de hace diez años. Este momento, en el que el sector se encuentra en un crecimiento previo exponencial, es crucial para poder mantener una industria que pueda absorber el crecimiento, con fortaleza y visibilidad a largo plazo. Esto no se está dando, como lo que ya ha pasado en los últimos meses con varias empresas que han sido adquiridas, subastadas o participadas por mala gestión y falta de profesionalización. La concentración en nuestro sector será una realidad en medio plazo. En estos momentos se ha dado la tormenta perfecta postcovid: menos demanda interna en China, materias primas alcistas (wafer, silicio, cobre, acero, aluminio...) a lo que le sumamos un pacto de precios de las navieras que es una vergüenza y debería ser intervenido. Solo tenemos que ver los resultados del primer trimestre de las empresas de referencia de las partidas anteriormente citadas. Digo esto porque de la misma manera que el sector aplicó reducción de precios creando suelo, de nuevo, podemos ver en el próximo año y siguiente lo mismo, pero con efecto contrario. Será interesante ver quién y cómo integra en su proceso estas variables.

Bien, ¿y a cuánto se está vendiendo el autoconsumo doméstico?
Es un segmento en el que no prestamos servicio debido a los volúmenes que quisiéramos considerar como aceptables sobre datos de obra reales, no marketinianos. Interesante lo que se ve en este segmento, pero preferimos verlo desde la barrera.

La Unión Española Fotovoltaica, la patronal del sector, acaba de crear un sello para acreditar la calidad de las instalaciones de autoconsumo. ¿Es necesario?
Algo hemos leído. Bueno, interesante ver esto. Desconocemos como se está estructurando. Lo que sí creemos es que la competitividad es sana, necesaria y estabiliza el sector a medio plazo en este y en todos los sectores. Las visiones proteccionistas y/o localistas, sobre todo en este sector, a corto plazo, suelen ser deficitarias y contraproducentes, teniendo en cuenta que partimos sin un valor previo, real y reconocido que poder comparar. Este tipo de reivindicaciones nacen en estructuras limitadas y que carecen de aporte de valor a sus procesos. Creemos que en nuestro sector preocupa más que no tengamos nuevos players en nuestra zona, entendiendo “nuestra” desde una percepción de propiedad, que tener una visión estratégica, de crecimiento y a largo plazo. Se vive del hoy. ¡Y eso que acabamos de empezar! Bueno, es un proteccionismo, sin más. Parar lo inevitable con un documento creyendo que facilitamos o damos seguridad al cliente, siendo interés de parte, dudo que sea lo más adecuado. Entiendo los miedos y temores del sector con la entrada de nuevos actores. Por nuestra parte, solo les decimos a los que entran que bienvenidos y que aquí les esperamos. Welcome to the jungle!

¿Qué impacto va a tener el nuevo modelo de factura eléctrica en los autoconsumidores?
Con la nueva factura cobrará especial importancia la búsqueda de la eficiencia energética y el ajuste de consumo a los tramos más baratos. Por eso el autoconsumo será una pieza clave como medida compensatoria. Ya lo es, pero este tipo de medidas nos hacen mucho más interesantes. Los cambios tarifarios encarecen el consumo eléctrico en los horarios de máximo consumo. Precisamente una de las puntas de consumo coincide con la máxima producción de las instalaciones solares, haciendo que la energía solar fotovoltaica sea aún más rentable para el consumidor final. Veamos cómo lo asume el consumidor final.

Una curiosidad, para acabar, ¿por qué un buen día EDF Solar le cuela la i latina en minúscula a su nombre y empieza a llamarse EiDF Solar?
Nuestra denominación social completa es Energía, Innovación y Desarrollo Fotovoltaico. La “i” corresponde a innovación. Ya estaba integrada en nuestro logo, dentro de la D, pero, con el objetivo de evitar confusiones con otras marcas del mercado, hemos optado por acentuar la diferencia y separar la “i”.

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