Teresa Ribera hizo estas afirmaciones en el Foro Solar de UNEF (Madrid, 19 y 20 de octubre), que en su primera jornada reunió ayer, de manera presencial, a más de 725 personas.
La vicepresidenta tercera habló también de lo importante que son las subastas renovables y los cambios que incorporan frente a otras convocatorias, como el de una subasta específica para plantas solares pequeñas, una reivindicación que UNEF llevaba tiempo solicitando. Desde el Gobierno, dijo, aspiran a alcanzar 500.000 techos solares y 1.200 comunidades energéticas de aquí a dos años.
Demandas de UNEF
El presidente de la Unión Española Fotovoltaica, Rafael Benjumea, hizo hincapié en el especial momento que vivimos en la lucha de cambio climático y en la necesidad, precisamente por la urgencia de actuar, de hacer las cosas de manera impecable desde el punto de vista ambiental y con la máxima responsabilidad social, para que sea, de verdad un cambio de inflexión.
Benjumea se refirió a continuación a la necesidad de agilizar los procesos administrativos para poder terminar en los plazos previstos los proyectos, por un lado, y lograr la suficiente seguridad jurídica para poder continuar con la contratación de PPAs, por otro. Algo en lo que coincidieron muchos ponentes de la sesión de ayer.
Por su parte, el director general del Instituto de Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), Joan Groizard, se refirió a lo importante que es para la salud y la recuperación económica, como ha quedado demostrado en la pandemia, la independencia tecnológica y energética. En este sentido, subrayó que "la fotovoltaica es una oportunidad, porque es autóctona y tiene capilaridad social".
Groizard resaltó, asimismo, el gran valor para pymes y empleo que tiene la cadena nacional de valor fotovoltaica y cómo la energía solar tiene un papel fundamental y transversal en el Plan de Recuperación, incidiendo tanto en el sector agroalimentario como en el autoconsumo en las administraciones. "La fotovoltaica –dijo– encaja a la perfección con el cambio que supone la transición energética y la participación ciudadana que trae de nuevas a través de sus múltiples modalidades".
Nuevos desafíos
El evento fue abierto por el director general de UNEF, José Donoso, quien se refirió "a la contestación social que en algunas zonas rurales de España ha despertado el necesario despliegue renovable para cumplir con los objetivos incluidos en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC)".
Para Donoso, "es importante movilizarnos y desactivar esos desafíos para convertirlos en oportunidades". Por ello, pidió la colaboración de todo el sector y agradeció que UNEF ya cuente con más de 600 empresas asociadas. “Debemos trabajar por la transparencia y la excelencia ambiental y social así como en la responsabilidad social a través del diálogo de las comunidades locales. La fotovoltaica es la energía más limpia, barata y respetuosa con el medio ambiente que puede ayudar a bajar los precios, combatir el cambio climático y democratizar el uso de la energía”, subrayó.
En cuanto a la vertiginosa subrida de la electricidad, aseguró que la fotofoltbia "es la solución al encarecimiento de la factura de la luz”. “Muchos de los problemas que tenemos sobre la mesa se solucionarán haciendo una apuesta decidida por la energía fotovoltaica. Los ciudadanos debemos exigir a las administraciones una apuesta decidida por una transición ecológica justa y sostenible”, añadió.
"No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras sube el precio de la luz. Los últimos acontecimientos han demostrado que ni España ni Europa pueden permitirse depender de los combustibles fósiles. Debemos exigir a nuestros representantes que se lo tomen en serio a todos los niveles”, concluyó.
PPAs, regulación, autoconsumo colectivo...
Las mesas de debate que se celebraron en la mañana de ayer pusieron de relieve como las empresas están adaptando sus estrategias a las nuevas circunstancias, un debate en el que los PPAs fueron protagonistas.
En la jornada también se habló sobre la regulación y las nuevas oportunidades que brinda a la fotovoltaica el autoconsumo colectivo, las comunidades fotovoltaicas o los agregadores de demanda. Quedó patente que estas iniciativas vienen creciendo desde hace ya unos años, pero también que las ayudas del Plan de Recuperación han sido, sin duda, un acicate más, si bien falta concienciación en la población.
Otras de las mesas se centraron en el potencial de las plantas fotovoltaicas para hibridarse con otras tecnologías y en identificar las barreras que existen para el desarrollo de sistemas de almacenamiento.
