El 10 de abril se termina el periodo transitorio que otorga el Real Decreto 900/2015 a las instalaciones de autoconsumo existentes antes de su entrada en vigor para adaptarse a la normativa y obtener la inscripción en el registro administrativo de autoconsumo. La fecha se acerca y el panorama normativo sigue sin aclararse. No obstante, en estos meses se han realizado importantes avances que marcan el principio del fin del impuesto al sol y del resto de trabas al autoconsumo que se han ido imponiendo.
En el plano normativo, todos los partidos políticos menos el PP y UPN se comprometieron, el pasado febrero, a derogar las principales trabas al autoconsumo en un periodo de 100 días desde que se forme un Gobierno, y a aprobar un texto concreto en forma de Real Decreto-Ley, anexo al acuerdo político. Asimismo, el compromiso recoge una obligación para el nuevo Gobierno de consensuar el futuro Real Decreto de autoconsumo con el resto de partidos políticos y las organizaciones sociales.
El principal obstáculo ahora es la formación de un Gobierno, hecho que resulta impredecible. Mientras tanto, mi consejo como abogado es que las plantas existentes se adapten a la normativa antes del 10 de abril, para evitar posibles contingencias para la instalación y las cuantiosas multas previstas en la normativa. Soy consciente de que ello implica realizar una importante inversión para la adaptación, pero no puedo recomendar otra cosa que cumplir con la norma.
Por otra parte, en el plano judicial, hemos recurrido el Real Decreto en nombre de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, Solartys, el Clúster de Eficiencia Energética de Catalunya, APPA, la sección española de Eurosolar, Alternativa Verda, Greenpeace, Día de la Terra y de varios autoconsumidores, tanto personas físicas como empresas. Todos los recursos han sido admitidos a trámite por el Tribunal Supremo y ya se nos ha dado traslado del expediente administrativo para que podamos presentar el escrito de demanda, a mediados del mes que viene.
Además, estos recursos han servido para que las eléctricas queden retratadas, ya que cuatro de los cinco miembros de Unesa se han personado como codemandados, defendiéndose en los litigios contra el Real Decreto de Autoconsumo, ¡ay, perdón! quería decir sumarse a la defensa del Estado.
Ha quedado claro ya en todo el proceso de elaboración de este Real Decreto que el mismo está pensado para satisfacer los intereses establecidos de las grandes eléctricas, perjudicando a los consumidores domésticos y a la industria nacional. De hecho, empresas como el Grupo Villar Mir o Repsol están en este caso en contra el Real Decreto y también lo han recurrido.
También podría decir que perjudica a todo aquello que no pertenece a las grandes eléctricas. Me gustaría poder decir que este impuesto eléctrico ha nacido muerto, pero no puedo. Ha nacido con pocas expectativas de vida, pero todavía suficiente para causar un daño innecesario.