El nuevo contrato de suministro energético de la Comunidad Autónoma de las Islas Baleares -informa el Govern- tiene un presupuesto de 71 millones de euros para los años 2020 y 2021 e incluye, además, "más de 800 puntos de suministro, con un consumo total de 212 gigavatios hora (GWh), lo que supone un ahorro respecto al 2019 de 3,2 GWh al año". Como parte del contrato, la empresa adjudicataria se encargará de la puesta en marcha de siete instalaciones fotovoltaicas, con una potencia total de 600 kilovatios pico. Las instalaciones se ubicarán concretamente en Menorca (Edar Ciutadella Sur); Ibiza (una en el Centro de Salud de Sant Antoni y otra en la Residencia de Can Blai) y Mallorca (Residencia de Son Güells, Instituto de Educación Secundaria Santanyí, Cepa Balanguera y Residencia Son Llebre). Así mismo, la empresa adjudicataria llevará a cabo la instalación de iluminación eficiente en todos los edificios de la Comunidad.
Hace menos de un mes, Endesa desconectó los grupos 1 y 2 de su central térmica Es Murterar (Baleares), que cesaron así su actividad tras varias décadas de operación (ambos grupos quemaban carbón para producir electricidad). El cierre ha sido fruto del acuerdo adquirido entre el Govern de les Illes Balears, el Gobierno central y Endesa en febrero de 2019. La compañía eléctrica cierra dos unidades y deja dos grupos operativos en Es Murterar, que tan solo podrán funcionar un máximo de 1.500 horas al año hasta el mes de agosto de 2021. Después -informa el Govern-, este cómputo de horas quedará reducido a 500 horas anuales hasta el cierre definitivo de la central.
Así será, según el Ejecutivo balear, "hasta que entre en funcionamiento el segundo enlace entre Mallorca y la Península, que se espera que se apruebe en la planificación energética 2021-2026". Según el Govern, tras el cierre debe reforzarse el funcionamiento de las centrales de Son Reus i Cas Tresorer, dos infraestructuras (también de Endesa) que funcionan con gas natural, combustible también fósil. Según el Ejecutivo balear, hasta el cierre de los dos grupos de Es Murterar, la actividad de esta central térmica de carbón ha sido reponsable del 29% de las emisiones de las Illes Balears. El cierre parcial implicará -continúa el Govern- una reducción total del 10% de las emisiones de CO2 de las Illes y un 27% de las de todo el sector eléctrico balear.
