El cliente-operador de los parques es la eléctrica E.ON, que ha renovado el contrato de operación y mantenimiento (OyM) con Vestas para los parques de Mallén (en Zaragoza, con puesta en marcha en 2006), Sierra del Tineo (Asturias, 2009), La Victoria (Cádiz, 2010) y Matabuey (Salamanca, 2011). El contrato renovado, de cinco años de duración, es del nuevo formato “AOM 5000” de Vestas, que “introduce una garantía basada en la producción energética que garantiza que los aerogeneradores estén completamente operativos cuando el viento sopla”, según afirma Vestas. Esta modalidad “ofrece una mayor certeza de producción energética y un mayor rendimiento que los contratos de mantenimiento tradicionales”, asegura, puesto que estos últimos “ofrecen una garantía de disponibilidad basada en el tiempo”.
El contrato se firma dentro de una tendencia sectorial de maximizar el rendimiento y reducir el riesgo de los parques, debido a la coyuntura económica actual. Algunos tecnólogos están ofreciendo contratos OyM de diez, doce o, incluso, veinte años a sus clientes como parte de su oferta de aerogeneradores y para mostrar su confianza en su propia tecnología. No obstante, algunos de los grandes operadores, principalmente las grandes eléctricas, prefieren contratos de más corto plazo –caso de E.ON– para así mantener abierta la opción de acudir al mercado competitivo de servicios OyM. Vestas afirma que cuenta con la “mayor organización de servicio y mantenimiento mundial de la industria eólica”, en la cual trabaja cerca de un 20% de toda su plantilla. La compañía cuenta con siete Centros de Rendimiento y Diagnóstico que recopilan constantemente información procedente de 31.500 MW en todo el mundo.
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