El parque eólico de Badamsha -explica Saft- está previsto genere 396 gigavatios hora de energía para la industria local "y ahorrará 344.000 toneladas de CO2 al año, lo que equivale a las emisiones de 74.000 coches". La operación, que la firma francesa ha hecho pública hoy, constituye el primer contrato de Saft con la empresa APS Energia, "que especificó las baterías por su probada fiabilidad en las duras condiciones invernales". Según el fabricante de baterías, "la energía de respaldo segura y sin mantenimiento es esencial para garantizar la generación continua de turbinas eólicas, particularmente para sitios remotos, en climas extremos, a los que los técnicos de mantenimiento tienen difícil acceso". Las temperaturas invernales en Badamsha -destaca en ese sentido Saft- pueden bajar hasta los -35°C, lo que se encuentra "dentro del rango operativo de las baterías de níquel cadmio Uptimax de Saft, que toleran un amplio rango de temperatura de entre -40 a +70 °C y brindan una larga vida útil de más de 20 años".
Alexey Kredin, director ejecutivo de APS Energia Kazajstán: "el largo historial de Saft en el suministro de soluciones industriales de baterías de níquel cadmio para climas fríos nos dio la confianza de que nuestro sistema de energía de respaldo proporcionará un rendimiento confiable para asegurar la continuidad de la generación en el parque eólico"
Saft suministró las baterías, fabricadas en Oskarshamn, Suecia, a través de su base en Moscú, desde donde ofrece asistencia técnica y asesoramiento en ruso a clientes de toda la región de la Comunidad de Estados Independientes (CEI). El sistema de respaldo con baterías de níquel cadmio, Uptimax, alimenta los sistemas mecánicos y de monitorización críticos para mantener la energía eólica en servicio durante todo el año.