La planta, inaugurada por autoridades de Ciudad de México y de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación (Seciti) local, ha recibido de esta última dependencia un apoyo económico de más de 740 mil dólares. Su desarrollo contó a cargo de la empresa Sustentabilidad en Energía y Medio Ambiente (Suema).
El biodigestor tiene entre sus componentes un tanque cilíndrico de acero de ocho metros de alto por cuatro de diámetro, con capacidad para más de 100 mil litros, que será alimentada con residuos de verdura y nopal. Las estimaciones son que pueda tratar 100 toneladas de residuos orgánicos al mes, generar 175 kWh diarios y producir casi 11 mil toneladas anuales de abono orgánico.
Según la Seciti, este modelo puede replicarse en las distintas delegaciones de Ciudad de México.
En la inauguración, director general de Suema, Jahir Mojica, dijo que esta planta es la primera de tratamiento y biodigestor instalada en un sitio de acopio de residuos y que trabaja a partir de la digestión anaerobia y termofílica.