El Gobierno de La Rioja e Iberdrola invertirán este año, en virtud del acuerdo, un presupuesto de 79.257 euros, financiado al cincuenta por ciento, "para aplicar medidas correctoras que reduzcan o eliminen los efectos perjudiciales que las instalaciones aéreas de alta tensión causan en las aves". El programa de actuación anual -informa el Gobierno riojano- se centrará en los conocidos como puntos negros, "aquellos lugares de la red eléctrica que registran mayores índices de mortalidad de aves, según los estudios que viene realizando la Dirección General de Medio Natural y los datos que recopilan los Agentes Forestales y los técnicos de la administración medioambiental riojana y de Iberdrola". Según el comunicado que difundió ayer el Ejecutivo riojano, los proyectos de modificación de las instalaciones eléctricas contemplan "el cambio de aisladores para evitar electrocuciones y la colocación de balizas salvapájaros en los conductores de manera que mejore su visibilidad, reduciendo también el número de accidentes de aves por colisión".
Las actuaciones que se contemplan en el convenio -informa el Gobierno riojano- pretenden adaptar los tendidos eléctricos a las normas del Decreto 32/1998, de 30 de abril, que estableció los requisitos y características técnicas que deben reunir las nuevas instalaciones eléctricas aéreas y los planes de reforma de las antiguas líneas para proteger a las aves. Según ese Decreto, que fue aprobado en 1998, "la adaptación de las instalaciones eléctricas ya existentes a las normas establecidas en este Decreto se efectuará progresivamente, atendiendo prioritariamente a aquellas de mayor peligrosidad".
La actuación que ahora se presenta, 19 años después de aprobada la norma, afectará a cuatro líneas en Moncalvillo, Las Ruedas de Ocón, Fuenmayor y Haro. El Decreto 32, que establece "normas de carácter técnico para las instalaciones eléctricas con objeto de proteger la avifauna", no obliga a la Administración a costear estas actuaciones. Su Disposición Adicional Primera dice, literalmente, que "se podrán establecer" Convenios de Colaboración entre las entidades propietarias de las instalaciones eléctricas y el Gobierno de La Rioja para la puesta en ejecución de las medidas programadas (o sea, que no es obligatoria la financiación pública).
Medio millón de euros en 19 años; 1.500 millones de beneficio neto en seis meses
Según el comunicado que difundió ayer el Ejecutivo regional, en los últimos 19 años Iberdrola y la administración medioambiental riojana han invertido algo más de un millón cien mil euros (1,1 M€) en actuaciones sobre 122 tendidos eléctricos. El Ejecutivo riojano concreta en ese comunicado que, durante esas dos décadas, "se han corregido 1.064 apoyos y se han señalizado 552 vanos para evitar la muerte por colisión; entre ambas actuaciones se han mejorado unos 300 kilómetros de líneas eléctricas".
En esa nota, el Gobierno no aclara sin embargo qué porcentaje de la inversión -en estos 19 años- ha correspondido a Iberdrola. Si la financiación ha sido al 50%, como este año, Iberdrola habría aportado a la operación en estos 19 años algo más de medio millón de euros (+0,5M€). En los últimos seis meses (enero-junio de 2017), la multinacional hispano-catarí (su principal accionista es el Fondo Soberano de Catar) ha declarado un beneficio neto de 1.518 millones de euros. La Rioja es gobernada por el Partido Popular desde mediados los noventa.
