El estudio afirma que si el gobierno pone en práctica medidas tales como permitir la exención del impuesto a las ventas y servicios, conocido como ICMS, en todos los estados, se podría llegar a tener instalaciones solares en casi 8,8 millones de azoteas. Esto también significaría un aporte de 3,1 mil millones de dólares en nuevos impuestos y crearía hasta 4 millones de puestos de trabajo.
El documento muestra que estas medidas, si se toman en todo el país, además podrían compensar 122,2 millones de toneladas de dióxido de carbono y dar lugar a la suspensión de proyectos de nueva planta de energía hidroeléctrica en la región amazónica, muy polémicos por su incidencia en el hábitat de sus habitantes y en el medio ambiente.
En marzo del año pasado el Consejo de Hacienda (CONFAZ) emitió una resolución para el Impuesto sobre Circulación de Mercaderías y Servicios (ICMS), que se centra en la generación de electricidad a partir de mini y microgeneración, y que permite a los estados interesados fomentar la fotovoltaica a través de eximir pagar dicho impuesto a los ciudadanos que opten por generar su propia energía.
Brasil es una federación constituida por 26 estados y un Distrito Federal, once de esos estados ya se han incorporado a la exención del ICMS: Acre, Alagoas, Minas Gerais, Rio de Janeiro, Rio Grande do Sul, Goiás, Pernambuco, Sao Paulo, Rio Grande do Norte, Ceará y Tocantins.