En el estudio, cuyo título en inglés es Sustainable Energy in America Factbook (Libro de los hechos de la energía sustentable en Estados Unidos) y que ya va por su cuarta edición, se sostiene que las políticas de apoyo desde distintos ámbitos públicos, principalmente los créditos fiscales a la producción y a la inversión, han dado lugar a un aumento en las instalaciones de biomasa. Así, mientras en 2013 hubo 556 MW de potencia añadida, en 2014 fue 106 MW y 140 MW en 2015.
Por otra parte, el informe indica que las nuevas capacidades de biogás han ido disminuyendo desde 2012, en parte debido a los bajos precios del gas natural.
En lo que respecta a los residuos sólidos urbanos, una planta de 85 MW de capacidad fue construida el año pasado. Se trata de la Unidad 2 de Palm Beach Renewable Energy. Por el contrario, 11 pequeñas unidades de biomasa y biogás con una potencia conjunta de 42 MW se retiraron de la operación el año pasado.
Las renovables son el 20% de la matriz
De acuerdo con el estudio, las fuentes renovables de energía ahora representan el 20% de la matriz energética del país, con cerca de 222 GW. Las instalaciones hidroeléctricas (79 GW) y de acumulación por bombeo (23 GW) representan casi la mitad, con 102 GW totales, una cifra que se ha mantenido más o menos constante desde 2008.
La eólica es la segunda tecnología renovable más frecuente, con poco menos de 75 GW de capacidad instalada a fines de 2015, más o menos el triple de lo que contaba al finalizar 2008 (25GW). La solar ha sido la de más rápido crecimiento, con un promedio de un 60% anual desde 2008, hasta alcanzar una capacidad total de 28 GW.
En conjunto, el gas natural y la energía renovable fueron responsables de más del 45% de la electricidad que se generó en Estados Unidos en 2015.