El 1 de enero de 2020 expiró la obligación de contar con una gasolina de protección que limitaba la incorporación de bioetanol a un cinco por ciento en las estaciones de servicio españolas. Solo se podía despachar gasolina 95 E5. Debido a un cambio normativo, ya es posible incrementar dichas mezclas hasta el diez por ciento y repostar E10.
La Asociación Española del Bioetanol (cuyas siglas son BIO-E) lo considera un “primer paso para que determinadas estaciones de servicio adopten decisiones que lleven a incorporar gasolinas renovables”. Añaden que “tradicionalmente en España los más activos a la hora de incorporar combustibles alternativos al petróleo han sido los propietarios de estaciones de servicio independientes, ya que al carecer de refinerías en su grupo empresarial no tienen tanto vínculo con la venta de los derivados petrolíferos que estas producen”.
José Ramón Freire, director general de BIO-E, reclama también “una campaña que explique las razones del cambio de combustible e informe a los conductores sobre la compatibilidad de sus vehículos. Esta acción debería contar con el apoyo del Gobierno y de todas las partes interesadas en la distribución y el suministro del E10”.
Cambio rápido al nuevo grado con E10 para evitar confusión en el consumidor
Freire añade que “es necesario coordinar y ordenar el lanzamiento del E10 a nivel nacional como parte de una obligación separada para la incorporación de las energías renovables en la gasolina. Esto asegura un cambio rápido al nuevo grado y evita la confusión del consumidor”.
En la misma línea, la Asociación Española de Profesionales de Automoción (Asepa) publicaba un documento el pasado mes de agosto donde advertía que “no se deben hacer las cosas a medias; la introducción gradual u optativa del E10 en el mercado no funciona, ya que crea competencia entre los distribuidores de combustible, erosiona la confianza de los consumidores y dificulta los esfuerzos de los Estados miembros por cumplir los objetivos medioambientales”.
Manuel Bustos, director de la sección de Biocarburantes de la Asociación de Empresas de Energías Renovables, se congratula igualmente de que “finalmente el Gobierno haya adoptado esta medida”, pero también advierte que “habrá que ver cuál es la respuesta del mercado en los próximos meses, es previsible que sean necesarias medidas regulatorias adicionales para fomentar la gasolina E10 en España, en línea con las adoptadas en países como Francia, Finlandia, Bélgica y Países Bajos”.
El 95 por ciento de los vehículos pueden usar E10 sin problemas
Sobre la repercusión del E10 en los motores, y aunque los fabricantes de automóviles y la industria petrolera han advertido reiteradamente sobre los riesgos, BIO-E y Aespa sostienen que la gran mayoría de los coches fabricados después del año 2000 son compatibles con el E10 sin necesidad de adaptación alguna. Concretan que más del 95 por ciento del parque de vehículos de gasolina de la Unión Europea admite sin problemas el E10.
La mayoría de los vehículos que no son compatibles son coches clásicos, antiguos y muy contaminantes. BIO-E añade que, por el contrario, la introducción del E10 “permite el desarrollo de motores más limpios y eficientes, ya que algunos estudios demuestran que la gasolina E10 frente a la E5 reduce las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) en un 34 por ciento, las partículas en cerca del noventa por ciento y los hidrocarburos en un sesenta”.
“El E10 se ha consolidado sin incidencias en Bélgica, Francia, Alemania, Holanda, Bulgaria, Estonia, Finlandia, Luxemburgo y Rumanía;, y está programada su introducción desde este año en Dinamarca, Eslovaquia, Hungría y Lituania”, concluye BIO-E. El pasado año, la patronal europea, ePure, impulsó igualmente una campaña para que el E10, e incluso el E20, llegará a más países de la UE.
Vertex Bioenergy como referente en la Asociación Española del Bioetanol
El documento que ha elaborado BIO-E para la dar la bienvenida al E10 es la primera acción de calado que emprende desde su constitución, el verano pasado. Está presidida directamente por la una de la empresas que forman el grupo Vertex Bioenergy (Bioetanol Galicia), el principal productor en España con tres plantas, y representado por su director general, Antonio Vallespir de Gregorio.
El resto de integrantes de la junta directiva lo forman representantes de empresas agroalimentarias, además de Novozymes, empresa biotecnológica. No está presente la otra compañía productora de etanol de España: Internacional de Alcoholes (InterAlco). Su objetivo general es “llevar a cabo todas aquellas acciones tendentes a fomentar el uso de biocarburantes sustitutivos de la gasolina (gasolina renovable) en el sector de la movilidad”.
Como objetivos más concretos abogan porque “en las estaciones de servicio españolas el usuario encuentre el E85 (85 por ciento de bioetanol), tan popular en otros países como Francia; y por una política equilibrada que alinee los objetivos de descarbonización con la fiscalidad de los combustibles. En España, paradójicamente, la fiscalidad de la gasolina renovable es superior a la de la gasolina, y muy superior a la de otros combustibles alternativos”.
