El informe -presentado por el presidente de A3E, Manuel Sayagués, el gerente de esta asociación, Antonio López Navas, y el jefe del Departamento de Planificación y Estudios del IDAE, Carlos López López- sitúa la eficiencia energética como un sector económico de relevancia y un pilar fundamental en la política energética española en sus tres vertientes, la económica, la medioambiental y la referida a la seguridad energética.
“Lo primordial de este trabajo es que se convierta en una guía de utilidad para la Administración, los consumidores, las empresas del sector y los emprendedores”, ha explicado Sayagués. Una vez identificados los principales conceptos en torno al ahorro y la eficiencia, los productos o servicios clave y las líneas de actuación, “esperamos que el estudio sirva también para fomentar todas las actividades de negocio asociadas al sector y su cadena de valor”, ha añadido.
En 2010 este ámbito generó en Europa un mercado por valor de entre 10.000 y 15.000 millones de euros. En España, según los datos del Institute for Enviroment and Sustainability, el mercado potencial rondaría los 1.400 millones de euros, pero por el momento, entre las 290 empresas registradas sólo se han logrado firmar 20 contratos. En este sentido Sayagués ha recalcado “lo importante que es avanzar ya que las inversiones en eficiencia energética permitirían, entre otras cosas, mejorar nuestra balanza de pago, generar empleo y hacer que nuestras empresas sean más competitivas”.
Grandes oportunidades de negocio
De hecho, entre las conclusiones extraídas del informe destacan las grandes oportunidades económicas que el sector puede generar, entre ellas la creación de 330.000 nuevos empleos o el ahorro de 1.500 millones de euros para los sectores de servicios e industria y su consiguiente repercusión en el PIB del. A este respecto, López Navas comentó que “no somos conscientes del auténtico potencial que tenemos, ya que además de todos los ahorros en consumo, el sector proporcionará una oportunidad de negocio para un gran número de empresas como fabricantes de equipos y componentes, empresas de servicios energéticos, consultoras, formación, I+D+i, etcétera”.
El informe, que la asociación de empresarios tiene pensado publicar cado dos años para dar a conocer los avances, detalla las principales amenazas, como son la incertidumbre regulatoria, el escaso acceso a la financiación, un enorme desconocimiento por parte del sector financiero y la revolución de los precios energéticos.
Una de las trabas es que “estamos ante un producto intangible”. Por ello, Carlos López ha explicado que “es necesario identificar y configurar un sector que es transversal y compatible con problemas como el déficit tarifario, las primas o la dependencia energética, entre otros”. El representante del IDAE señaló que “la eficiencia ha pasado de ser una idea a transformarse en un producto y ahora hay que aprender a suministrarlo”. Así mismo, aseguró que “España está perfectamente preparada para afrontar este nuevo mercado tanto desde el punto de vista de la tecnología como de la gestión empresarial”.
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