En ese país, Oxfam Intermón trabaja con las comunidades de 166 aldeas de la región central norte, concretamente en las provincias de Namentenga y Sanmatenga. El objetivo es mitigar la escasez de agua potable, uno de los efectos más notorios de las sequías que afectan a buena parte del territorio. Burkina Faso es considerado uno de los países más pobres del planeta. Cerca del 80% de su población depende de la agricultura y la ganadería, dos actividades que se han visto especialmente afectadas por el aumento de las temperaturas en los últimos años. ¡Aunque hay esperanza!
A través del proyecto Braced, Oxfam Intermón no solo busca impulsar el desarrollo social de estas comunidades, sino sobre todo ayudar a que sus habitantes mitiguen los efectos del cambio climático con la puesta en marcha de prácticas respetuosas con el medio ambiente, sobre todo entre las familias más vulnerables. Para ello, se ha apoyado de un valioso recurso que cada vez gana más protagonismo en el escenario mundial: las energías renovables.
El propósito del proyecto Braced en esta región es mejorar el acceso al agua potable de las comunidades, algo que a su vez se traduce en un mejor nivel de vida y en la reducción de enfermedades, epidemias y crisis alimentarias. Las claves son:
● La esencia del proyecto es la extracción de agua potable a través de un sistema de bombas que funciona con energía solar.
● El agua es extraída de unos pozos ubicados estratégicamente para que puedan acceder las familias más vulnerables de la región central norte del país. La idea es evitar que las personas caminen durante horas para obtener el agua de consumo diario.
● El sistema consta de dos torres de agua construidas por Oxfam Intermón. Desde allí se pone en marcha la extracción de agua de los pozos. Cada una de las torres abastece de agua a unas 1.000 personas al día.
● No todos los pozos del sistema tienen la misma función. Existen cuatro pozos de agua destinados al consumo diario, otros dos para la limpieza y el cuidado de los animales y 60 más para el uso hortícola, los cultivos de arroz y los sistemas de irrigación de otro tipo de cultivos.
● Además de la extracción de agua por este medio, Oxfam Intermón ofrece formación y acompañamiento para la gestión y el mantenimiento de los pozos, así como promoción de hábitos de limpieza e higiene entre las comunidades de la zona.
Mejorar las condiciones de vida
La extracción de agua potable a través de bombas de energía solar ya es en sí mismo un valioso aporte para el cuidado y la preservación del medio ambiente. Sin embargo, no es el único beneficio para los habitantes de las provincias de Namentenga y Sanmatenga.
El agua es la principal fuente de vida. Al mejorar el acceso a ella, el bienestar de las familias aumenta y, a la vez, se mejoran otros aspectos de su cotidianidad. En este caso, el proyecto Braced pone énfasis en otros dos frentes complementarios a la extracción de agua potable: la prevención de la malnutrición y el empoderamiento de las comunidades
Para hacer frente a las necesidades alimentarias de la población local, Braced crea un sistema de reserva de productos y contribuye a diseñar y gestionar un fondo de emergencias en caso de desastres naturales o sequías. Las tres vertientes de este énfasis del proyecto son el acceso a los alimentos (especialmente entre los niños), las prácticas adecuadas y la higiene y el saneamiento.
Para dar más poder a las comunidades, Oxfam Intermón busca que estén cada vez más preparadas ante eventuales cambios meteorológicos severos. Para ello, proporciona información sobre el estado del clima a través de las radios locales o de mensajes de texto en los móviles. Esta información también es un gran aporte a la hora de proteger los cultivos de la zona o de diseñar campañas de temporada. En caso de que las familias pierdan toda o parte de su cosecha por culpa del clima, Braced también dispone de un fondo de emergencias para mitigar los efectos de esta situación.
