La iniciativa parte de EU ProSun, que desde 2012 representa a los fabricantes europeos del sector solar fotovoltaico y en la que participan 30 compañías con más de un millar de instalaciones conectadas. EU ProSuyn cuenta, además, con el apoyo de más de 200 instaladores.
En la carta, a la que ha tenido acceso Energías Renovables, los fabricantes dicen sentirse muy preocupados ante la posibilidad de que la Comisión renuncie a su propuesta inicial de extender dos años más las medidas antidumping sobre las importaciones de paneles chinos. Una decisión que podría tomar después de que la semana pasada una mayoría simple de los Estados miembro de la UE rechazara continuar con las sanciones, como resultado de una votación realizada en el marco del Comité de Defensa Comercial de la UE.
EU ProSun afirma que esta votación solo representa a un tercio de la población de la UE. Añade que para la industria solar europea, la prórroga de las medidas antidumping por solo dos años es, incluso, “una posición de compromiso muy frágil”. En cualquier caso, consideran que hacerlo por un tiempo menor “desalentaría seriamente cualquier nueva inversión de la industria de la UE”, y acabaría con “la esperanza que las medidas (antidumping) han creado hasta ahora y que han permitido el inicio de la recuperación y la renovación de las inversiones y el empleo en el sector de fabricación solar fotovoltaico europeo”.
“La posibilidad de que la Comisión exprese de algún modo la intención de no permitir una nueva prórroga de las medidas, ya sea en la propuesta o en un mensaje separado a los Estados miembros, sería un terrible error”, asegura EU ProSun. Cree que con ello “se enviaría exactamente la señal equivocada no solo a los fabricantes solares, sino a toda la industria de la UE, y justo en un momento en que la Comisión se ha pronunciado a favor de medidas de defensa comerciales eficaces”.
Igualmente, prosigue, “se enviaría una señal de notable debilidad a China, pidiéndole sólo un poco de paciencia antes de que se le permita tener éxito en su plan para acabar con los fabricantes de energía solar fotovoltaica de la UE y hacerse con el dominio (de este mercado), gracias a los subsidios (que recibe en China)”.
Para EU ProSum, solo a los inversores y “epecistas” puede interesar la retirada de las sanciones. En este sentido, la asociación señala que, tras la reducción del apoyo a la energía solar FV en diferentes países de la UE, “varias empresas EPC piden ahora acabar con las sanciones a China, principalmente para obtener ganancias inesperadas y aumentar su margen de beneficio comprando módulos subsidiados más baratos”.
Una industria puntera a escala mundial
Así las cosas, los fabricantes europeos de energía solar FV consideran que no hay ninguna justificación para que la Comisión modifique su propuesta inicial de prorrogar las sanciones al menos durante los dos años inicialmente previstos. Y acompañan la carta de un informe en el que desautorizan muchos de los argumentos esgrimidos por quienes quieren acabar con ellas.
En este sentido, señalan que es falso que la industria de la UE no sea tan competitiva como la china. “El 90% de todas las patentes significativas utilizadas para la producción de células solares y módulos de vanguardia se han desarrollado en la UE y los Estados miembros europeos y la UE ha invertido varios cientos de millones de euros en I + D para la tecnología solar. En este terreno, la industria manufacturera de la UE todavía está de uno a dos años por delante de sus competidores chinos”.
Los fabricantes recuerdan, asimismo, que en Europa se encuentran los más altos estándares de calidad, sociales y de sostenibilidad, y una excelente infraestructura universitaria para la tecnología fotovoltaica. Y afirman que pese a que muchas empresas manufactureras cerraron antes de que se adoptaran las medidas antidumping, desde que éstas se implementaron en 2013 el número de empresas volvió a crecer, los centros de producción que habían estado inactivos fueron reabiertos y la industria comenzó de nuevo a invertir y contratar.
Otra razón esgrimida por Eu ProSun para protegerse del comercio desleal chino es el coste de la electricidad solar en los países de la UE, ya más bajo, asegura, que en otros mercados importantes, como Estados Unidos, Japón, Turquía e incluso China, así como las expectativa de un aumento significativo de las instalaciones en países como Alemania.
Tampoco consideran cierto, como aseguran los partidarios de poner fin a las sanciones, que la industria de la UE pueda sobrevivir concentrándose simplemente en tecnologías de sistemas inteligentes y en servicios complementarios. “No hay ninguna razón para permitir que la industria de la UE se reduzca a tecnologías de nicho”. De hecho, EU ProSun cree que “la industria de la UE puede seguir liderando la industria global en términos de sostenibilidad, calidad y tecnología”. Pero “sin una defensa eficaz contra las importaciones objeto de dumping procedentes de China, se derrumbaría completamente en sólo unos pocos meses”, concluye la asociación.
