El histórico aterrizaje se produjo a las 15:55 GMT del 3 de julio tras un vuelo ininterrumpido de cinco días y cinco noches, a lo largo de los cuales el avión recorrió 4.480 millas (7.200 km). Con ello, André Borschberg, cofundador de Solar Impulse junto a Bertrand Piccard, ha batido dos records: el de distancia y duración de un vuelo solar y el de tiempo ininterrumpido en vuelo (117 horas y 52 minutos). La Federación Internacional Aeronáutica ya los ha ratificado.
El equipo de Solar Impulse informa de que “el piloto tuvo que soportar muchos desafíos para mantener cuidadosamente un equilibrio entre el uso de la máscara de oxígeno durante largos períodos de tiempo al volar a gran altitud, descansar lo suficiente y maximizar los niveles de energía del avión, especialmente durante condiciones meteorológicas turbulentas”. Que esta octava etapa del histórico vuelo haya sido un éxito, con todos los equipos funcionando correctamente durante cinco dias y cinco noches consecutivos, “demuestra que el objetivo de Solar Impulse de volar de manera ilimitada sin combustible, utilizando únicamente la energía del sol, no era un sueño: el vuelo perpetuo es una realidad”, añaden.
"Me siento lleno de júbilo por este extraordinario viaje. He subido a una altitud equivalente a la del Monte Everest cinco veces y sin mucho descanso. El equipo del Centro de Control de Misión en Mónaco (MCC) ha sido mis ojos y mis oídos ... La MCC ha estado esforzándose para darme la posibilidad de descansar y recuperarme, maximizar los niveles de energía de la aeronave y enviarme trayectorias y estrategias de vuelo simulado por ordenador ", ha declarado André Borschberg. "Este éxito valida plenamente la visión que mi compañero Bertrand Piccard tenía de lograr volar de manera ilimitada en un avión sin combustible".
"Lo que André ha logrado es extraordinario desde el punto de vista de un piloto. Pero, además, también ha liderado el equipo técnico durante la construcción de este prototipo revolucionario. No es sólo es algo histórico en la aviación, también es una primicia para las energías renovables”, ha declarado, por su parte, Bertrand Piccard, presidente e iniciador de la aventura.
El Solar Impulse ha sido creado por estos dos pioneros para demostrar como la innovación y las tecnologías limpias pueden cambiar el mundo y animar a la gente a ahorrar energía y utilizar fuentes renovables. Para catapultar esta idea al siguiente nivel, Solar Impulse ha puesto en marha la campaña “Future in Clean”, pidiendo a quienes quieran secundarla que añadan su voz en www.futureisclean.org. Un sitio web desde el que tratan de convencer a los gobiernos de todo el mundo de la necesidad de poner en práctica soluciones de tecnología limpia y ayudar a asegurarse de que la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio climático (COP21) sea un éxito.
El avión solar inició la travesía en marzo pasado en Abu Dhabi. La siguiente etapa le llevará a Phoenix (EEUU), desde donde proseguirá a Nueva York y Europa para finalizar la aventura en el mismo lugar donde la empezó.
