“Hemos utilizado un frigorífico para albergar los distintos elementos necesarios para fabricar biodiésel, como los depósitos, las electroválvulas o las mangueras”. Así explica a Dicyt Javier Brezmes, alumno de la Escuela Politécnica de Zamora, el desarrollo de una planta piloto adaptable a cualquier hogar o empresa. El producto conseguido, biodiésel, es apto para emplearlo como combustible en coches o en calefacción. Brezmes ha trabajado junto su compañero Álvaro Vaquero y han contado con la dirección del profesor Roberto José García Martín y la colaboración de las también profesoras Ana Vivar, Auxiliadora García y Soledad San Román.
El aceite vegetal usado se somete a un proceso de 24 horas de duración en el que se mezcla con reactivos (metóxido e hidróxido de potasio) para separar los esteres de la parte destinada a convertirse en biodiésel. Tras la reacción química, además del biocarburante, se obtiene glicerina, un subproducto que es necesario retirar y que se puede destinar a otros fines (para hacer jabón o abono) con el debido conocimiento del proceso.
Un litro de biodiésel por cada litro de aceite usado
Brezmes ha declarado a Dicyt que el primer combustible resultante del proceso “aún tiene impurezas que queremos eliminar”, por lo que en una nueva fase se mezcla con agua, se introduce en un depósito y se agita para que el agua atrape esas partículas. También señala el alumno que la recuperación del aceite en forma de biodiésel es el 100%, es decir, “de cada cinco litros de aceite usado se podrían obtener otros cinco litros de biodiésel”. El proyecto está enmarcado en el Programa de Prototipos Orientados al Mercado de la Universidad de Salamanca dentro del Proyecto de Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa (T-CUE) de la Junta de Castilla y León.
En Energías Renovables expusimos hace un año la experiencia de José Santos, ingeniero agrónomo que publicó un libro con el título Utilización del aceite vegetal como combustible para motores diesel. En esta publicación Santos explica tanto el proceso de adaptación de cualquier coche a la utilización de aceites vegetales, como la existencia de una amplia gama de equipos para hacer la conversión, casi todos vendidos como kits para que los monte el propietario del vehículo o en un taller mecánico. Con anterioridad, y en una línea parecida a la de los alumnos de la Escuela Politécnica de Zamora, el blog del periodista Clemente Alvárez (EcoLab, en El País), también ofrecía información sobre iniciativas para fabricar biodiésel casero.
