La Red Española de Desarrollo Rural dio a conocer recientemente la publicación del informe Potenciales suministros de biomasa sostenibles y sus repercusiones socioeconómicas, en el que se recogen las conclusiones del proyecto en el que han participado cuatro grupos de acción local. Estos grupos abarcan la comarca del Nordeste (ADC Nordeste), los municipios de la vega del Segura (ADRI), el noroeste de la Región de Murcia (Integral) y áreas rurales de Murcia y Cartagena, además de localidades como Cieza (ADC Campoder). En total suponen una superficie que llega al 68,3% de la región, con territorios fundamentalmente agrícolas y forestales y con una importante industria agroalimentaria y de transformación de la madera.
Este perfil agro-forestal le dota de un potencial de aprovechamiento de la biomasa que, unido a niveles de desempleo superiores a la media regional, una población envejecida y el abandono del campo, impulsó el desarrollo del proyecto. El estudio ha permitido cuantificar en 388.000 tep anuales el potencial de biomasa residual aprovechable para usos energéticos. No obstante, en el informe final se especifica que el cálculo no considera la posibilidad real de explotación o los aprovechamientos que de ella se hagan actualmente.
Una tercera parte del potencial energético procede de la cabaña porcina
“Sería necesario llevar a cabo un análisis más exhaustivo –señalan en las conclusiones– con los diferentes tipos de biomasa residual contemplados que tengan en cuenta el potencial real, es decir, la energía generada por toda la biomasa que se puede utilizar con las tecnologías existentes, que no posee otro valor que el energético, y cuyo aprovechamiento es técnica, económica y ambientalmente viable”. Tras esta salvedad, el reparto por sectores del potencial estudiado es el siguiente: 137.000 tep/año en ganadería, 111.000 tep/año en agricultura, 80.000 tep/año en el sector forestal y 60.000 tep/año en la industria de transformación de vegetales.
La mayor contribución energética en el sector ganadero corresponde a la cabaña porcina, con 127.871 tep/año, lo que representa el 93% del potencial estimado. Dentro del potencial agrícola, el 30% procede de los cereales, el 28% del viñedo y el 19% del almendro, con importantes contribuciones de cultivos leñosos de olivar, melocotonero, cítricos y albaricoquero. En las conclusiones se señala también que la mayor densidad energética superficial (más de una 1 tep/ha), se obtendría del viñedo (1,15), de los restos de trigo (1,07), de melocotoneros (1,05) y de los albaricoqueros.
Más rentables los pélets que el biogás
Según señala la publicación, “si la cantidad de leñas procedentes de coníferas (sobre todo Pinus halepensis) en los cuatro territorios Leader se destinara a uso energético se obtendrían 80.000 tep/año, siendo Integral (noroeste) donde se ha calculado el mayor potencial (54 ktep/año)”. Por otro lado, el procedente de la biomasa residual de la industria de los transformados vegetales estaría en torno a 60.000 tep/año, destacando los valores para el tomate (28.000 tep/año), melocotón (9.000 tep/años) y alcachofa (7.600 tep/año).
El informe final también hace valoraciones económicas y sociales: “Del análisis financiero de la industria de obtención de pélets se deduce que, dado los costes estimados y los precios de venta del mercado, esta industria es rentable. La comercialización de astillas también aparece como una actividad rentable. Sin embargo, la producción de biogás implica unos costes inasumibles para el inversor”. También se afirma que “la actividad conjunta de recogida, transporte y transformación generaría más de 800 puestos de trabajo y unos costes de producción en torno a los 54 millones de euros”.
La Asociación para el Desarrollo Comarcal del Nordeste de la Región de Murcia ha actuado como grupo coordinador de un proyecto que está cofinanciado por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y el Gobierno de la Región de Murcia.
