La propietaria de la accidentada central nuclear de Fukushima, Tokyo Electric Power (Tepco), ha pedido al operador de Pokémon GO que cambie los ajustes del popular juego para móviles para evitar que las criaturas aparezcan en centrales nucleares. Tepco ha detectado al menos un Pokémon en las instalaciones de una de las tres plantas atómicas en las que ha realizado pruebas: la accidentada central de Fukushima Daiichi, la vecina Fukushima Daini (ubicada a 12 kilómetros de la primera), y la de Kashiwazaki-Kariwa de Niigata, en el noroeste del país.
La compañía, que ha pedido a sus trabajadores que no jueguen a Pokémon GO en las instalaciones, no ha especificado dónde encontró a la criatura virtual para evitar que se produzcan intrusiones en la zona en cuestión, como la de los tres adolescentes que se colaron en una central nuclear de Ohio (Estados Unidos) buscando Pokemon.
El regulador nuclear de Japón ha instado a las compañías propietarias del país a que refuercen la seguridad en sus plantas para evitar casos similares. El exitoso juego para teléfonos inteligentes Pokémon GO, producto de un proyecto conjunto entre la estadounidense Niantic, la japonesa Nintendo y The Pokémon Company, se lanzó en Japón el pasado viernes. La aplicación usa la tecnología GPS de geolocalización y la cámara del terminal para que los jugadores busquen a los Pokémon en diferentes ubicaciones del mundo real, informa la agencia Efe.
La empresa instaladora de renovables SUD Renovables ha aprovechado el miedo que ha generado la aparición de un Pokémon en una nuclear para contar que hace dos días encontraron al de la foto en la planta fotovoltaica de Artés, en Barcelona, donde fue muy bien recibido. “Las renovables son 100% seguras, no tenemos nada que prohibir, ni que esconder”, ha dicho Manel Romero, responsable de SUD Renovables y representante de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) en Cataluña.