LSolé desarrolla una segunda caldera de biomasa, acumulando un total de 7 MW de energía térmica, en dos plantas de producción de pelets en Polonia –un proyecto de alrededor de un millón de euros– que pasa a internalizar así su consumo térmico. La fase de secado por aire caliente será impulsada a partir de la bioenergía de los subproductos de esta empresa. “En cada planta se aporta 3,5 MW térmicos entregados sobre aire caliente canalizado para la fase de extracción de la humedad o secado del pélet. Sin duda, este es un caso paradigmático ya que la bioenergía contribuye a generar el propio combustible renovable”, informan desde LSolé.
Por otro lado, Xavier Gil, director de Desarrollo de Negocio de LSolé, impartió el pasado jueves una ponencia durante las jornadas técnicas de la Fira de Biomassa Forestal de Catalunya, donde explicó la contribución de la empresa a determinados casos de éxito para la industria “que aprovechan la propia bioenergia renovable y son una oportunidad para la reducción de costes, especialmente en un contexto de carestía y déficit energéticos”.
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