El parque, desarrollado por la empresa Rouar S.A., a casi 40 km de la capital del país, Montevideo, consta de 31 aerogeneradores de 2,1 MW cada uno del fabricante indio Suzlon Energy, y ha significado una inversión total de 100 millones de dólares, entre aportes de ambas empresas (30%) y el apoyo de la Comisión Andina de Fomento (70%).
La producción estimada anual de energía es apta para abastecer a 80 mil hogares, aproximadamente una vez y medio el consumo anual de la ciudad de Colonia del Sacramento.
En el acto de inauguración, el ya expresidente Mujica (ayer lo sucedió Tabaré Vázquez), dijo que decisiones de este tipo que se tomaron en conjunto con Brasil “son pensadas con conocimiento, porque el mundo se está agrupando en gigantescas unidades plurinacionales”.
“Estamos muy lejos de estar integrados, pero por primera vez los gobernantes de América Latina se consultan, miran, conversan, dialogan y acuerdan. Nunca tuvimos en América Latina está realidad de carácter político”, agregó.
Por su parte, la presidente brasileña Dilma Rousseff dijo, dirigiéndose al mandatario uruguayo, que “el destino quiso que fuera yo la que estuviera acompañándote en el último día de tu presidencia, querido amigo Pepe”.
Respecto a la obra en sí, y a otras relacionadas con la interconexión eléctrica entre los dos países, Rousseff aseguró que “hoy se están derribando barreras tecnológicas impuestas por el colonialismo histórico en cuanto a nuestra integración energética”.
Finalmente, el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, destacó que el parque eólico Artilleros “es una experiencia importante, la primera negociación de escala con Electrobras y la primera inversión física que ellos realizan en el exterior”.
El titular de UTE declaró que emprendimientos de este tipo ayudan también a la propia capacitación profesional de los trabajadores de la empresa.
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